El guiño de Daniella Semaan a Lady Di en su boda con Fàbregas

El pasado martes, y sin previo aviso -se esperaba que fuera en verano-, Daniella Semaan y Cesc Fàbregas se daban el «sí, quiero» en compañía de un puñado de amigos y familiares. En las antípodas, pues, del multitudinario enlace de su buen amigo Leo Messi con Antonella Rocuzzo en Rosario (Argentina), al que Cesc y Daniella no faltaron. Por cierto, tanto la argentina como la libanesa han lucido en sus respectivos enlaces un vestido de Rosa Clará .

Tiempo habrá para más celebraciones, pero llama la atención que la pareja quisiera sellar su amor de manera tan discreta. Se conocieron en 2010, en un restaurante japonés de Londres, cuando ella se acercó para solicitarle un autógrafo para su hijo Joseph . En aquel momento, Fàbregas militaba en el Arsenal y Semaan estaba casada con el empresario inmobiliario libanés Elie Taktoutk. El flechazo fue inmediato y la furia de Taktoutk por el súbito enamoramiento de su señora se hizo notar. Además de calificar de «tonto» al futbolista durante una entrevista para «The Sun», auguró una vida breve para la nueva pareja: «Ella lo dejará en cuanto su dinero y su fama se terminen. Fàbregas no es David Beckham », bramó.

No acertó el bueno de Taktoutk y Semaan se instaló en el domicilio de Fàbregas junto a sus dos hijos mayores - María (18) y Joseph (13)- cuando aún no había firmado el divorcio. Y con el centrocampista del Chelsea ya ha tenido tres críos antes de pasar por la vicaría: Lia (5), Capri (2) y Leonardo (1).

Junto a Antonella Rocuzzo, a quien Semaan considera una «hermana del alma», y en compañía de Sofía Balbi , la mujer de Luis Suárez , componen un trío de amigas que acompaña a los deportistas durante sus escapadas a Ibiza. Daniella se ha convertido en toda una influencer , con un caudal de seguidores en Instagram superior a los dos millones. Por ello, por su espectacular físico y su poder de convocatoria, las marcas se la rifan.

Semaan sabe cómo sacar partido a su poderío y en las redes sociales suele publicar distintas versiones de sí misma con prendas y accesorios lujosos. Un ejemplo de ello fue un brazalete de Cartier valorado en 45.000 euros, del que la libanesa presumió tiempo atrás. También dice ser una adicta a Chanel, por lo que es habitual verla con sus emblemáticos bolsos colgados del hombro. Pero no todo es fachada. Considerada como la WAG más sexy del mundo , también utiliza sus redes para difundir mensajes religiosos. Daniella es una mujer de fe.