Diez claves para ser una novia moderna

En las bodas actuales, ellas suelen elegir atuendos más sencillos o -todo lo contrario- más complicados y artísticos que nunca . En general, se lleva la frescura y la naturalidad, la variedad de accesorios y un peinado menos estructurado . En las pasarelas de este año, han desfilado vestidos ligeros, accesorios románticos y tocados de ensueño. Aunque cada cual haga lo que más le apetezca o se adapte a su situación, aquí van diez ideas novedosas sacadas de las pasarelas.

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Tutús y tules

Los olvidados tutús, vuelven a la actualidad para las bodas. El tul, tantas veces denostado, es ahora el protagonistas de vestidos de novia y fiesta . Cortado a medida, puede adaptarse a siluetas sencillas de caída años 50, o escalarse en varios volantes o capas. Se combinan, no obstante, de un modo atrevido, con jerseys en blanco o plata o bien con camisas blancas de corte estricto. Este modelo es del desfile de Giambattista Valli para la primavera del 2016.

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Tocados singulares

Se llevan los tocados de flores, los de oro viejo y bronce con filigranas. Pero la gran novedad son los tocados de flores de porcelana , que se pueden crear a medida y no se estropean durante la ceremonia. Algunos están tan bien hechos que parecen flores de verdad, con la ventaja de estar disponibles en cualquier época del año. Los mejores, los de Paloma de Flórez , consagrada paisajista que elabora tocados y sombreros a medida ( www.hawkermadrid.com ).

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Calzado cómodo

Las novias tienen la obligación de sonreír y saludar a todos en su día de boda, y esto a veces se hace complicado con un calzado incómodo o de un tacón muy alto. Para las muy altas, la mejor alternativa son unas bailarinas . Las que prefieran llevar tacón y se casen en verano pueden optar por sandalias con plataforma de rafia. Estas son de Aquazzura , 550 euros, aunque se venden modelos similares en muchas tiendas.

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Abrigos blancos

En las bodas en las que la novia elija un vestido corto o un pantalón, es lo lógico utilizar un abrigo para la llegada. Los abrigos blancos, en tweed ligero para la mañana o en tejidos más sofisticados para la tarde-noche, son el complemento perfecto. Ya habrá tiempo de lucir el vestido más tarde. Este sencillo modelo, de 69 euros en Zara , lleva los vivos desfilados como algunos trajes de chaqueta de Chanel .

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Bolsos a la moda

Sí a los bolsos. Algunos modelos se llevan colgados del brazo –al estilo monedero de boquilla con cadena– bordados en petit point o con pedrería. También se llevan las pochettes de mano rectangulares , casi planas y en ante o tela, para llevar en la mano, ya sea tras la ceremonia o para novias en traje de pantalón o de corto. Un must en las bodas civiles. Clutch plateado de Diane von Furstenberg (240 euros).

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Anillos diferentes

Las más inconformistas pueden elegir anillos de boda innovadores pero elegantes: aros en oro envejecido o martelé, doble anillo con aro y baguette de brillantes -como los de Repossi - o aros esmaltados en colores. Estos anillos de oro esmaltados se venden en distintos tonos y son de los famosos fotógrafos de moda (1.392 euros, en Net-a-porter). No obstante, al tratarse de un anillo que se llevará siempre, hay que estar segura de que no canse.

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Vestidos desestructurados

Los vestidos sencillos y rectos en crêpe , ajustados pero elegantes, están de moda. También los modelos asimétricos con distintas capas y tirantes, de silueta actual y gran caída. En realidad, se trata de posibles versiones de vestidos de fiesta adaptadas -por el tono blanco y el tejido- a las ceremonias de boda. Vestido de cady stretch con remates en organza de seda, 2.735 euros, Jason Wu en Net-a-porter .

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Velos cortos

Sin llegar a ser los velos cortos abullonados de los años 60, como el que lucía Gina Lollobrigida en la película «Cuando llegue septiembre» , de Robert Mulligan, los velos cortos de caída simple han vuelto a aparecer en las pasarelas. Se trata de una alternativa para valientes que no tiene por qué no quedar discreta. Este modelo es de J.Crew , en tul con topos, de 180 euros, aunque es más sencillo hacérselo a la medida que se desee.

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Gasas y mangas largas

Las gasas y otros tejidos ligeros con un toque infantil, están de moda. Los vestidos de corte túnica con sencillas lazadas vuelven a la palestra, recuperados de los años 70 . Del mismo modo, se llevan otros estilos opuestos, como los elegantes vestidos de corse de corte medieval en los que Lorenzo Caprile es el número uno, o los vestidos de inspiración princesa árabe, cargados de bordados metálicos. Vestido blanco largo en plumetti, 149,99 euros, Mango .

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Pendientes espectaculares

Aunque no hay nada más único y especial que llevar los pendientes de las abuelas o bisabuelas, si no son muy favorecedores, se puede optar por alternativas más actuales y democráticas. Se llevan los pendientes grandes en piedras semipreciosas de tonos suaves, que completen un atuendo sencillo. A evitar si se lleva un collar o una diadema importante. Citrinos, morganitas o cuarzos están a la última. Marie Hélène de Taillac , 3.198 euros, Net-a-porter.