Los cinco anillos de compromiso de Jennifer Lopez

El pasado verano, JLo reinó en las pistas de baile con aquel fraseo que decía «nunca había sentido algo tan grande y me vuelve loca tu lado salvaje, tú me has dado tanto que he estado pensando ya lo tengo todo, pero ¿y el anillo pa’ cuando?». Muchos lo tacharon de machista y vulgar, pero ella lo entonaba con fina ironía, mientras movía las caderas. Desde entonces, su legión de admiradores ha estado esperando a que Alex Rodriguez (43), la estrella del béisbol que le robó el corazón dos años después, se decidiera a ponerle en el dedo tan ansiada joya .

Y, por fin, esta semana la cantante y actriz acaba de recibir su quinto anillo de pedida y así lo ha contado con una romántica serie de fotos publicada en sus redes sociales, donde su prometido, con la rodilla clavada en la arena de una playa de Bahamas, le hace entrega de tan ansiada pieza: un diamante de corte esmeralda, valorado en 2 millones de dólares. Y es que JLo, como buena puertorriqueña nacida en el Bronx, presume de sus humildes orígenes y de lo lejos que ha llegado.

Desde entonces, muchos han sido los memes que han corrido como la pólvora las redes sociales a propósito de los anillos de Jennifer . Hay quien afirma, con bastante guasa, que tiene tantos como Michael Jordan , seis veces campeón de la NBA. Bromas a parte, es cierto que en lo que a atesorar diamantes y esmeraldas se refiere, ya le pisa los talones a la mismísima Elizabeth Taylor , que con ocho bodas y siete maridos -se casó dos veces con Richard Burton - formó un magnífico joyero.

Su primer anillo de compromiso lo recibió Jennifer Lopez en 1997 de manos de Ojani Noa , su primer marido. Un diamante de corte marquesa, valorado en 100.000 dólares. En 2001, su segundo anillo se lo dio Chris Judd , otro bailarín de su compañía -como en el caso de Noa-, con quien compartió un efímero matrimonio de menos de un año. Pero lo cierto es que Judd le regaló una esmeralda que, hasta la fecha, es la favorita de la actriz.

Tal vez el anillo que más dolores de cabeza y de corazón le haya causado a JLo fue el que le hizo entrega Ben Affleck. Se conocieron durante el rodaje de «Gigli», en 2002; y su pasión competía con el amor más sereno de la otra pareja del momento, la formada por Brad Pitt y Jennifer Aniston . Affleck le propuso matrimonio con un diamante rosa de seis quilates, que compró al joyero Harry Winston y que está valorado en 2,5 millones de dólares. Sin embargo, días antes de la boda el actor canceló el compromiso y puso pies en polvorosa . Fue el gran fracaso sentimental de Jennifer Lopez.

Bastaron unos días, tras la ruptura con Ben, para que la actriz y cantante se entregara a los brazos de su buen amigo y compatriota Marc Anthony (50). Junto al artista portorriqueño pudo anestesiar el dolor y la vergüenza de la traición de Affleck. Así lo confesó en sus memorias publicadas en 2014, «True Love». « Busqué comodidad en otra persona , que me diera amor en mis horas de soledad». Marc Anthony regaló a Jennifer un diamante rosa de 8,5 quilates, también de Harry Winston, con un valor que doblaba el de Ben Affleck: 5 millones de dólares. La pareja se casó en 2003 y tuvieron dos hijos gemelos, Max y Emme. Con su corazón ya rehecho, Lopez se divorció de Anthony en 2015 y empezó a salir con Alex Rodríguez en 2017, con quien en breve sumará su cuarto matrimonio. Entre uno y otro, medió una relación con Casper Smart , que JLo finiquitó cuando descubrió unos tórridos mensajes de texto del bailarín con una modelo transexual. Casper ha sido el único novio oficial que no buscó puso un anillo de compromiso para JLo.