El romance de Roberto Verino con México

Así, siendo fiel a su estilo a la hora de vestir a la mujer urbana, Verino nos hace una propuesta espectacular basada en prendas sencillas y muy ponibles que se complementan con collares maxis a base de las plumas, tomadas de las peleas de gallos, los colores de la cultura azteca, los ponchos y hasta las referencias mariachis a través del ornamento.

«Quiero hacer feliz a la gente, quiero que la calle sea la pasarela , sino, habré hecho un trabajo a medias», asegura Verino. De ahí que efectivamente veamos en su desfile vestidos cortos y de talle largo confeccionados a base de estampados florales perfectos para una noche de verano, shorts combinados con camisas de tejidos frescos y lino para las confecciones de caballero. La colección estará a la venta a partir del próximo mes de febrero.

La música protagonista no podía ser más acorde: «Para no vivir desesperado», de Instituto Mexicano del Sonido. Los colores elegidos por Verino tampoco son casuales: arena inspirados en los desiertos mexicanos, la fuerza del rojo o la alegría del fucsia con la espiritualidad del azul para dejar paso, como no, al siempre tan majestuoso -bien empleado por parte del diseñador- negro, perfecta para la noche. Ahí, para acabar el día, las prendas son de encaje y sofisticadas para ella, smoking perfecto para él.

Atención a los complementos, majestuosos aros XXL en oro, pamelas y zuecos. Los veremos también próximamente en tienda.