La menor que mantuvo relaciones «consentidas» con su novio de 27 años en 2018 niega haber sufrido abusos

El procesado se enfrenta a una petición de cárcel de once años de reclusión por parte de la Fiscalía por un presunto delito de abuso sexual a una menor con agravante de parentesco, solicitud que la acusación particular, ejercida por los padres de la chica, eleva hasta los doce años.

Según el escrito de acusación provisional del Ministerio Público, al que ha tenido acceso EFE, los hechos tuvieron lugar un día sin determinar de octubre de 2018, cuando el inculpado, que supuestamente mantenía con la chica una relación sentimental sin convivencia, le propuso tener relaciones sexuales completas «con el propósito de satisfacer sus deseos libidinosos», a pesar de ser «conocedor de la edad de su pareja».

El documento precisa que la chica «accedió voluntariamente» , si bien aclara que, al ser reconocida por el equipo psicosocial judical, «se le detectó un desequilibrio en la relación de pareja, atendiendo a la diferencia de edad entre ellos, estilo de vida y las vivencias de cada uno» que sugiere «asimetría en la relación».

Los profesionales de este mismo equipo también constataron en el inculpado «un comportamiento inmaduro, impulsividad, baja tolerancia a la frustración y escasa capacidad de autocrítica, asumiendo un rol de víctima, sin mostrar empatía hacia la menor , así como sintomatología depresiva y ansiedad generalizada en el momento de la exploración».

En la primera jornada del juicio oral, celebrada este lunes a puerta cerrada en la Audiencia de Guipúzcoa, la menor, que ha declarado tras un biombo, ha rechazado todos los hechos , ha sostenido que no mantuvo ningún vínculo sentimental con el procesado y ha negado haber mantenido ninguna relación sexual con él.

Está previsto que la vista se reanude el próximo miércoles con la práctica de distintas pruebas periciales y posteriormente concluirá en una fecha aún por determinar con las declaraciones de un testigo que hoy no ha podido acudir al juicio y la del acusado que ha solicitado testificar en último lugar, según han indicado fuentes del caso.

Además de las citadas penas de cárcel, la Fiscalía demanda para el procesado que no pueda comunicarse con su víctima ni aproximarse a ella durante diez años, que se le imponga una medida de libertad vigilada durante siete años una vez que sea excarcelado y que compense a la chica con 20.000 euros por el daño moral causado.

Igualmente, el Ministerio Público pide que se acuerde la toma de muestras biológicas del acusado y que se le hagan análisis para la obtención de identificadores de ADN, así como la inscripción de los mismos en la base de datos policial.