El ministro Óscar Puente lanza un bulo sobre las incidencias de Metro para exculpar el caos de Cercanías

El último día de caos en Cercanías se produjo el pasado lunes, cuando un tren se quedó parado y cerrado a pocos metros de entrar en la estación de Atocha. La aglomeración de personal y el calor, en unos vagones que tampoco tenían climatización, llevó a la desesperación a los viajeros. Alguien abrió las puertas y comenzaron a bajar a las vías para llegar desde allí andando a la estación, con grave riesgo.

El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible dio sus explicaciones ayer tras el Consejo de Ministros: tras pedir «disculpas a los usuarios» y reconocer que «nada me produce mayor desazón que las imágenes que he podido ver en el día de ayer», recordó que la puntualidad media de sus trenes es del 95,7 por ciento, y es mayor que la de París, Londres y el doble que en Alemania. Añadió que el Gobierno está en proceso de renovación de sus convoyes.

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Y tras la comparación con Europa, acercó un poco el foco y se fijó en el suburbano madrileño. Para decir que «las incidencias en Metro multiplican por diez las de Cercanías». Y añadió: si en 2023 hubo unas 700 en la flota de Renfe-Cercanías, «multipliquen eso por diez» para tener el dato de las que había sufrido Metro en el mismo periodo. Y hasta se fijó en la última, «ayer, una incidencia importante», que no provocó a su juicio tanto revuelo porque hay una «descompensación desde el punto de vista del foco público».

Desde el Gobierno regional, la Consejería de Transportes que dirige Jorge Rodrigo se apresuró a a responderle. Primero, señaló que «los datos en los que se ha basado el ministro para establecer esa comparación no son homogéneos y gran parte de ellos no causan afección al viajero». Y añadió que «las incidencias de Metro en 2023 fueron un total de 271, frente a las más de 700 de Cercanías, por lo que Metro tiene un 62 por ciento menos; por tanto, es falso que las incidencias del suburbano madrileño multipliquen por diez a las de Renfe. Metro es un transporte público fiable y seguro que mueve a más de 2,3 millones de viajeros cada día, frente a los 670.000 de Cercanías».

Por lo que se refiere a la incidencia que sufrió Metro el lunes, y a la que hizo referencia el ministro Puente en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, la Comunidad de Madrid recordó que esta fue «por causas ajenas a Metro: una asistencia sanitaria que obligó a paralizar el servicio en cuatro estaciones de Línea 1».

Otro de los argumentos que utilizó el ministro Puente en sus explicaciones sobre el caos en Cercanías se refería, de nuevo, al Metro, concretamente al estado de su flota. «En 2003, Metro tenía un 95 por ciento de trenes disponibles; ahora tiene un 90; el material rodante se está deteriorando». De nuevo la Consejería de Transportes rechazó el dato: «También es falso. Metro invirtió 145 millones de euros en 2023 solo en conservación de trenes, cuya edad media es de 21,1 años. Además, recientemente se ha adjudicado la compra de 40 nuevos convoyes y en breve se adjudicarán 40 más por un importe de más de 800 millones de euros».

El Gobierno regional recordaba que cada vez que se produce un incidente en Cercanías, hay que reforzar el resto de la red de transporte público, especialmente Metro, lo que le cuesta a la Comunidad «unos 20 millones de euros al año», según dijo la presidenta Díaz Ayuso en 2023. Ayer, ante las palabras de Puente, Ayuso resumía: «Se tiene que informar mejor el ministro».