La ruta otoñal con la cascada más grande de Madrid perfecta para hacer en familia

Pero una parte que a veces parece algo olvidada de el territorio madrileño es su riqueza natural, de la que no escasea. La sierra de Madrid engloba numerosas zonas en las que disfrutar del medio ambiente y desconectar de lo que supone estar siempre entre ruido, gente y edificios altos.

Si eres de los que busca este tipo de planes al aire libre, hoy te proponemos un plan muy especial en el que la protagonista es una gran cascada, de hecho, es la más alta de Madrid, y lo mejor es que llegar hasta ella no requiere recorrer un camino complejo ni muy largo.

También conocida como Chorrera de los Litueros, esta cascada es la más alta de toda la Comunidad de Madrid, con 1.433 metros de altitud sobre el nivel del mar y una cascada a unos 40 metros de altura. Las aguas de las cimas de las montañas y otros riachuelos se funden sobre las piedras dando lugar al nacimiento del río Duratón, el cual forma esta imponente cascada.

Ubicada al norte de la ciudad madrileña, este paraje natural pertenece al municipio de Somosierra y, para llegar hasta allí, se puede viajar en coche por la A-1 y recorriendo 93 kiómetros, o coger los autobuses de las líneas 190A y 190B desde Plaza de Castilla. Tal es la belleza del lugar que ya han sido muchas las personas que la han visitado y han querido contar su experiencia, como muestra la publicación de la cuenta @mamasviajeras.

Como se puede ver en las imágenes, la cascada es un paraje de ensueño perfecto para visitar en esta época de otoño, pues después de las lluvias el torrente de agua es más intenso y caudaloso. Otra de las razones para visitar este enclave natural, es que la ruta que hay que recorrer para llegar hasta él es bien sencilla y apta para niños, por lo que el plan es ideal para hacer en familia.

En Somosierra, como indicamos, comienza el inicio de la ruta hasta la cascada. Concretamente, en la antigua N-1 dirección Burgos, pasada una gasolinera a la derecha y cerca de la ermita de Nuestra Señora de la Soledad, el recorrido a pie empieza, habiendo antes zona para aparcar. Se trata de un itinerario lineal, señalizado y de unos dos kilómetros entre la ida y la vuelta, por lo que, según la velocidad que llevemos, se tardará sobre una hora en hacer toda la ruta completa.

La dificultad de esta ruta de senderismo es muy baja, por lo que es ideal para hacerla con niños o personas con poca experiencia. Apenas tiene pendientes y es de fácil acceso, tan solo se complica un poco más cuando nos acerquemos a la cascada, pero se puede realizar teniendo precaución y asegurando donde pisamos.

En la ruta habrá que pasar 100 metros y una puerta metálica, que se atraviesa por la derecha, dejándola cerrada para que no se escape el ganado. A otros 100 metros se asciende girando y se sigue en otra pista que encotrnaremos de frente. Después daremos con el arroyo de Las Pedrizas, que hay que cruzar pisando sobre las piedras que nos ayudan a ello, con precaución. Unos 50 metros adelante, hay un cartel que indica el sendero, y sube con suavidad una ladera haca una pared de rocas, recorriendo 400 metros.

En los últimos 50 metros ya veremos la cascada y tendremos que pasar el tramo más complicado porque tiene grandes escalones y algo de pendiente, pero pasados estos ya podremos disfrutar de la gran Chorrera de los Litueros. La ruta de vuelta es por el mismo camino pero a la inversa.