Los mejores planes de teatro en Madrid para este fin de semana

La sala, referente en el panorama independiente de la capital, ha preparado tres propuestas muy distintas pero con un denominador común: atrapar al espectador con historias irreverentes, cargadas de humor y cercanas a la realidad cotidiana.

Por un lado, «El siervo y las iluminadas» pone sobre las tablas a dos monjas que, tras un sueño profético, se lanzan a una delirante revolución que mezcla sátira y ternura.

En contraste, «Tía, me dejas muerta» ofrece un cóctel surrealista de fiesta, amistad y esoterismo, donde la risa convive con lo inesperado cuando una de las protagonistas cruza la frontera entre la vida y la muerte.

Y para los que prefieren una comedia más terrenal, «El banco de Sarah Sanders» convierte un encuentro por Tinder en un retrato hilarante de las contradicciones de las relaciones modernas.

Tres obras, tres estilos y un mismo escenario que este fin de semana invitan a despedir agosto con cultura y buen humor en pleno corazón de La Latina.

El verano en Madrid también es tiempo de buen teatro, y el Teatro Off Latina (Calle Mancebos, 4) vuelve a ser escenario de propuestas sorprendentes que apuestan por la frescura y la crítica social con mucho humor.

Entre ellas destaca «El siervo y las iluminadas», una comedia original de la compañía Terra Fusión, dirigida por Marco Román.

La obra, definida como una «dramedia» irreverente, arranca con una premisa tan disparatada como atractiva: dos monjas, Sor Sagrario y Sor Consuelo, reciben un sueño profético que las anima a liderar una revolución dentro de la Iglesia. Su objetivo no es menor: conseguir que las Siervas de Dios puedan formar familias como cualquier otro creyente, cuestionando así de forma directa las estructuras patriarcales de la institución eclesiástica.

En medio de este estallido de fe y rebeldía, aparece el padre Pedro, que al principio intenta frenar el movimiento, pero acaba arrastrado por la fuerza visionaria de las monjas. Lo que comienza como una misión celestial se convierte pronto en una batalla llena de situaciones absurdas, ironía y mucho humor.

La pregunta queda en el aire: ¿serán estas monjas las auténticas Mesías del nuevo milenio?

Con diálogos provocadores, un ritmo ágil y escenas cargadas de crítica y carcajadas, «El siervo y las iluminadas» se presenta como una propuesta valiente, capaz de invitar a la reflexión sin perder nunca el tono cómico y ligero.

Una opción perfecta para quienes buscan teatro alternativo, actual y diferente en el corazón de La Latina.

Este fin de semana, no te puedes perder «Tía, me dejas muerta», una comedia tan irreverente como emotiva que llega para conquistar al público madrileño con su tono desenfadado, mágico y reflexivo.

La obra gira en torno a dos amigas tan diferentes como inseparables. Deisy, entregada al horóscopo, los rituales y las energías, vive convencida de que el destino está escrito en las estrellas. Saray, en cambio, representa el polo opuesto: noches eternas en la fiesta madrileña, ligues fugaces y diversión hasta que el cuerpo aguante. Dos mundos que conviven en equilibrio… hasta que un accidente inesperado lo rompe todo.

Cuando Saray se ve atrapada entre la vida y la muerte, Deisy no duda en poner a prueba sus creencias. A través de un ritual esotérico, intenta comunicarse con el espíritu de su amiga para averiguar si quiere regresar o prefiere dejarse llevar.

De este modo, lo que parecía una comedia ligera se transforma en un viaje hilarante y surrealista hacia lo más profundo de la amistad y los vínculos que realmente importan.

Con un guion ágil, situaciones disparatadas y diálogos cargados de humor y ternura, «Tía, me dejas muerta» ofrece una experiencia teatral que combina fiesta, misticismo y reflexión.

Bajo la dirección de Paco Maldonado, con interpretaciones de Sarah Sanders y Carles Moreu, esta comedia convierte lo cotidiano en un retrato desternillante de nuestras relaciones actuales.

«El banco de Sarah Sanders» arranca con una premisa sencilla: dos desconocidos, Gloria y Charles, que tras conocerse en Tinder deciden verse en persona.

El escenario de su primera cita no es otro que un banco de parque. Sin embargo, lo que comienza como un encuentro casual pronto se transforma en un desfile de silencios incómodos, confesiones inesperadas y situaciones tan absurdas como reconocibles.

La obra juega con la ironía de los encuentros modernos y muestra cómo lo más simple puede volverse complejo cuando entran en juego las expectativas, los miedos y el deseo de conexión. Con ritmo ágil y humor cercano, esta pieza convierte una cita cualquiera en una radiografía divertida y entrañable de la vida contemporánea.