La Policía revisa cinco historias clínicas de la auxiliar de Alcalá, que pudo empezar a matar en 2013

Lo que están haciendo los agentes de Homicidios es escudriñar en las circunstancias de esos cinco fallecimientos, por si en ellos se apreciara algún tipo de etiología criminal. Estas pesquisas se llevan a instancias de la juez instructora, quien, pese a ello, habla de cuatro supuestos casos , como adelantó ABC: la intentona de 2013, dos muertes en el verano de 2015 y la que destapó toda la historia, hace ahora once días. Por lo tanto, la auxiliar de enfermería habría empezado a desarrollar su supuesta faceta homicida hace ya cuatro años. Se da la circunstancia de que, además, durante el año y medio que estuvo de baja por una lesión en un brazo (de diciembre de 2015 a mayo último) no se produjeron fallecimientos sospechosos en la planta 5 B del Príncipe de Asturias.

Sin embargo, fuentes policiales insisten en que es más que complicado conseguir ahora pruebas sobre esos casos , al menos de los dos primeros referidos en el auto de la juez, puesto que entonces no se realizaron pruebas médicas postmortem (como los TAC que sí pusieron sobre aviso a los médicos en los dos últimos óbitos) que llevaran a la sospecha.

El abogado de la auxiliar López Doncel, José Julián Raboso, dijo a Efe que su defendida «es inocente hasta que se demuestre lo contrario» y ha exigido que prevalezca la presunción de inoce ncia, algo que, en su opinión, no se está respetando «al publicarse datos de una investigación que está bajo secreto», lo que es «impropio del estado de derecho». Raboso ha confirmado que Beatriz, de 37 años, negó ante la juez los hechos que se le imputan. Pero la magistrada no la cree.