División entre los expertos sobre la vacunación a trabajadores en contacto con el público

En este sentido, desde el Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Madrid defienden que se tenga en cuenta a los «trabajadores esenciales y de industrias críticas o con dificultad para mantener la distancia social» y que se vacune a «todos los trabajadores esenciales siempre que haya posibilidad». El comité científico sobre coronavirus de la asociación ya estableció en un informe del 22 de diciembre quiénes consideraba que eran los candidatos preferentes a recibir las dosis, pero no entra a valorar qué sectores son esenciales. «La prioridad debe decidirse sobre criterios científicos y de equidad , considerando los ámbitos sanitario, social y económico», aseguran.

Desde la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (Seimc) también piden que todas las decisiones se rijan por criterios epidemiológicos. «Los siguientes grupos en la priorización de la vacunación deberán basarse en criterios epidemiológicos, clínicos y sanitarios», afirma Miren Basaras, portavoz y secretaria del grupo de Vacunas. Bajo estas premisas, cree «fundamental vacunar al mayor número de personas en el menor tiempo posible para evitar que el virus pueda sufrir modificaciones que puedan dar lugar a escapes de la vacunación». «Actualmente, disponemos de muy pocas dosis de vacunas, lo que supone que solo se haya vacunado el 2% de la población española», dice. En la región, se han administrado 199.945 dosis de las 232.775 recibidas. «Con la actual escasez de dosis es imposible alcanzar una inmunidad de grupo en un tiempo breve», concluye.

Pilar Serrano, enfermera epidemióloga y doctora en Salud Pública, añade, además, el criterio ético. «Los principios clínicos y epidemiológicos están basados en el riesgo, pero tiene que haber también un principio ético , sobre todo en un escenario en el que no hay demasiados recursos», dice sobre la escasez de vacunas. Ella defiende que la posible modificación del calendario de vacunación, algo que tiene que ser refrendado por el Consejo Interterritorial y el Ministerio de Sanidad, no dependa solamente da la profesión. «Una vez que se administre a los mayores, sanitarios y enfermos crónicos, deben seguir todos aquellos sectores esenciales, como las fuerzas del orden, los trabajadores del sector de la alimentación y las farmacias. Si hay algún camarero que sea de riesgo, ya entra a formar parte del grupo anterior y se vacunará antes que a sus compañeros. Esto ya está contemplado en el calendario que aprobaron todas las comunidades», opina: «La hostelería no se acoge a esos criterios».

El posicionamiento de Ayuso y la posibilidad de modificar el sistema de vacunación cuando sea masiva y haya dosis suficientes (un extremo que la Comunidad no puede cambiar unilateralmente) ha dado pie a lo que parece ser un nuevo choque con el Gobierno de Pedro Sánchez. La portavoz María Jesús Montero ha manifestado, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de este martes, que la decisión «debe basarse en criterios técnicos y científicos y no políticos». «No se trata de que cada día cada uno reivindiquemos un colectivo para que sea prioritario . No me parece serio ni es la actitud que tenemos que perseguir», ha aseverado Montero. A pesar de esto, el Ejecutivo regional llevará la propuesta a la Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial. «Estamos pensando en todos aquellos sectores y profesionales directamente en contacto con personas que tienen muchos impactos a lo largo de su día de poder contagiar o ser contagiados, una vez que se vayan vacunando los grupos ya determinados », ha indicado el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero , en una entrevista en Telemadrid, donde ha pedido que «como mínimo, se estudie esta opción».

Los que sí están a favor son los sectores citados por Ayuso. «Nosotros consideramos que cualquier camarero puede tener contacto con muchos clientes y nos parece una medida adecuada, pero se trata de una estrategia sanitaria, no económica», cuenta Juan José Blardony, director de Hostelería Madrid. Para él, la vacunación fomentaría una mayor confianza en el sector y beneficiaría en la recuperación del consumo. «Consideramos que después de las restricciones esta también es una manera de ayudar al sector , aunque coincidimos en que se debe priorizar a los colectivos de riesgo. Una vez esto se haya hecho, es importante pensar no solo en ayudas económicas sino en medidas como estas que fomentan el consumo y dan seguridad», expone Blardony.

Con él coincide Francisco García, portavoz de CSIF Educación, que reclama que el profesorado sea considerado sector prioritario. «Esta debe ser una medida consensuada para que no haya discriminación con otras comunidades, y hay que tener en cuenta que entre el colectivo docente existe gente que puede ser de riesgo y profesores cerca de la edad de jubilación. Es una buena manera de seguir con la labor docente con todas las garantías», explica.

En el gremio de taxistas también reciben la proposición con ganas. «Como colectivo de público y expuesto al virus, cuanto antes se nos vacune, mejor . Pero lo haremos cuando nos corresponda y lo acataremos. Ya se han quedado demasiados compañeros por el camino», cuenta Julio Sanz, presidente de la Federación Profesional del Taxi, aunque se muestra dubitativo: «No sé si sera un brindis al sol o realmente hay intención de alterar el calendario y poder llevarlo a cabo».