«¿Bancos en Sol? Que Carmena acabe antes con la degradación»

«Mira. Entre los Mickey Mouse que se pelean, los de compro oro , los top manta , los chaperos y las bosnias a la caza del despistado, esto no se arregla poniendo unos banquitos para sentarse. ¿Quién los va a utilizar? Quizás algún abuelo que quiera descansar pero poco más... Lo imp ortante es acabar, de una vez por todas, con la degradación de la zona ». Nos habla un comerciante de Sol de los de toda la vida. Ya no quiere ni que se publique su nombre porque está harto de amenazas y de insultos . Luchar por una Puerta del Sol digna, bonita, castiza y turística la ha costado más de un disgusto. A él y a sus empleados. «Así, desde el 15-M y los perro-flautas», se queja la encargada de otro local dedicado a la telefonía móvil.

«¡Que Carmena ponga los bancos dentro del Ayuntamiento y que le vayan a ella allí!», exclama, agriado, un empleado de Metro que enfila a su puesto de trabajo. «Bueno, siempre es mejor eso que sentarse en la fuente. ¡Menuda imagen para el turismo! », comenta mientras se aleja de nosotros.

José Gutiérrez asoma con una sonrisa socarrona desde su kiosco de prensa. «No creo que los bancos, si los pones, se utilicen para botellón . Aquí hay vigilancia a cualquier hora del día. Si los ponen, mejor. Lo agradecerán los ancianos , si es que logran sentarse. ¿Y no han pensado en poner sombras? porque esto es insufrible en verano».

Para José, lo importante también es que se acabe con la prostitución. Ahí sigue. Lo que ha aumentado –y él asiente con la cabeza–, es la prostitución masculina: jóvenes de países del este apostados en las barandillas de las bocas del Metro y de Renfe a la espera de clientes. «El turista no es tonto. Y esa estampa no es agradable», dice.

Ana Justo , empleada de helados «Palazzo», aplaude la instalación de bancos «para que los ancianos y las madres con niños pequeños puedan descansar. Los abuelos no se pueden sentar alrededor de fuente... no habría modo de levantarse». A ella también le parece buena idea poner sombras «aunque a los clientes ya les digo que no se extrañen, que están en Sol».

Bancos, seguridad y limpieza . Esa es la fórmula de José María Ezquiada , decano del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM). «Es una decisión elogiable . Nosotros ya la propusimos. Sí a los bancos públicos y, complementariamente, con alguna terraza , porque no se puede obligar a nadie a que tenga que pagar una consumición para descansar», asegura.

En opinión de Ezquiaga, «como lo cortés no quita lo valiente, para que un espacio funcione tiene que ser amable, seguro y limpio . Eso es lo que hay que conseguir en la Puerta del Sol».

«Tenemos que lograr un lugar ajeno a los conflictos , un espacio para todos. Sol –añade– necesita mucha más seguridad. Es cierto. Pues démosela. Y por favor, que quiten los pinchos de las fuentes centrales. Además de que son horrorosos y un peligro, dan una imagen de crueldad innecesaria que no beneficia al conjunto».