Freixanes toma las riendas de una RAG sin grandes voces críticas

La candidatura de Freixanes saltó a la luz pública el pasado viernes, cuando él mismo confirmó su decisión de dar el paso para liderar el proceso de renovación de la directiva con el aval del presidente saliente, Alonso Montero, y de los académicos Margarita Ledo y Antón Santamarina. Su nombre fue uno de los más repetidos en las quinielas para presidir la institución, aunque el propio Freixanes mantuvo la incógnita hasta el último momento y rechazó realizar declaraciones, abogando por resolver el proceso en los cauces «internos» de la institución. En esa misma línea, la mayoría de los académicos prefirieron guardar silencio para evitar una disputa pública como la protagonizada en las últimas elecciones, después de la dimisión de Xosé Luis Méndez Ferrín.

Los anteriores comicios internos en la RAG evidenciaron una fractura en la institución entre partidarios y detractores de Ferrín, acusado de nepotismo por contratar a su hija y a su yerno, tal y como destapó ABC. La polémica acabó con su dimisión y posterior salida voluntaria de la institución académica. Además, algunos miembros de su equipo, como el catedrático Xosé Luis Axeitos acusó a entidades como la Xunta o el Consello da Cultura de intentar hacerse con el control de la RAG.

En el mandato de Alonso Montero, el propio Axeitos mantuvo su postura crítica respecto al papel de la directiva, aunque tanto él como otros miembros de la institución, como Manuel González o Henrique Monteagudo, trasladaron su intención de llegar a puntos de encuentro. Pese a que finalmente se ha presentado una única candidatura, la continuidad de las críticas parece indicar que no será una lista de consenso la que tomará el relevo de la institución, aunque sí de base amplia.