La investigación tuvo su origen tras recibir en el mes de enero varias denuncias de robos y hurtos. Después de múltiples gestiones, labores de vigilancia, monitorización discreta y seguimiento del entramado delictivo, la Guardia Civil obtuvo pruebas evidentes de la estructura y coordinación del grupo criminal y procedió a la localización y detención, entre los días 3 y 12 de enero, de seis personas, que se les atribuyen robos en casetas de campo de diversas localidades y en una casa consistorial.
Así mismo, se localizó una masía situada en la localidad de Useras que era su base logística y donde se almacenaban los efectos sustraídos.
Tras la realización de varios registros debidamente autorizados, los guardias civiles aprehendieron y recuperaron tres televisores, un motocultor, dos neveras, dos calentadores, dos bicicletas, un horno, una vitroceramica, un congelador, una motobomba, una electrobomba, un generador eléctrico, tres teléfonos móviles, tres ventiladores, un remolque, dos ordenadores, mangueras de riego, cuatro rollos de tela asfáltica, paquetes de electrodos, mazas de grandes dimensiones, martillos y ventiladores industriales, tres motosierras y 350 metros de mangueras de cobre, que fueron entregados a sus propietarios.
Siempre utilizaban el mismo 'modus operandi', forzaban las casetas, donde sustraían lo efectos y, una vez en su poder, eran trasladados a su base logística, lugar donde eran almacenados. Uno de los detenidos ha sido ingresado en prisión.
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