Según confirman fuentes cercanas a la investigación, el arrestado se enfrenta a una posible condena en Bélgica de hasta 30 años de prisión por homicidio en grado de tentativa.
Las pesquisas para su localización comenzaron en el mismo momento en el que las autoridades belgas enviaron información a la Sección de Localización de Fugitivos, advirtiendo de que podría encontrarse escondido en España al calor de unos amigos.
Las gestiones realizadas por parte de los investigadores dieron como resultado la confirmación de que su paradero era la ciudad de Alicante. Una vez en la zona, los agentes desplazados detuvieron al fugitivo tras localizarlo al lado de un negocio de comida rápida regentado por una amiga.
La amenazó con matar a su perro
El prófugo, el pasado 7 de octubre, mandó a su expareja una fotografía de su perro a modo de amenaza con la intención de que ella volviera a su casa para comprobar la integridad y bienestar del animal.
A consecuencia de ello, cuando su exnovia se encontraba cerca de su domicilio junto a un amigo para comprobar el estado del animal, el arrestado, sin mediar palabra, realizó varios disparos llegando a herir a ambos.
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