El clamor en el PSOE fuerza a Ferraz a actuar contra Leire Díez tras 72 horas de tormenta política

Al clamor se había sumado ya el presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien en una entrevista en Radio Nacional aseveró que «cada minuto que pasa sin tomar medidas damos a entender que esta señora tiene algún tipo de amparo», informa Fernando Franco. Pero incluso dirigentes de peso mucho más próximos a la Ejecutiva socialista martillearon en esa dirección, como hizo en el Congreso el diputado por Barcelona y ex secretario de Organización del PSC, José Zaragoza, y hasta la mismísima presidenta del PSOE, Cristina Narbona, quien tras reconocer que había conocido a Díez como responsable del partido en Santander, afirmó estar «muy disgustada».

El líder del Partido Socialista de Euskadi (PSE), Eneko Andueza, durante un desayuno informativo en Madrid de Nueva Economía Fórum, afirmó que la actuación de la militante estaba «fuera de tono» y manifestó su enorme respeto por la Guardia Civil, un cuerpo al que en el País Vasco –enfatizó un dirigente que vivió en primera línea los años duros de ETA– se le tiene «mucho cariño».

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Patricia Romero

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En ese ambiente, Ferraz pasó casi sin solución de continuidad de considerar el expediente como una posibilidad no inminente, porque habría que esperar incluso a una reunión ordinaria del Comité de Garantías del partido, a anunciar su ejecución. Eso sí, negando una vez más que Díez trabajase para el aparato del partido y abogando porque en el proceso abierto ahora se pueda recabar toda la información posible, incluida la hora de grabaciones de la militante socialista con varios abogados que aún no se ha podido escuchar.

Eso sí, los socialistas se cuidaron en transmitir que «todos los afiliados tienen deberes, pero también derechos, y que la apertura de este expediente no implica ninguna medida cautelar». Así ha sido, sin ir más lejos, con el expediente abierto el año pasado al exministro José Luis Ábalos, de momento suspendido provisionalmente de afiliación, a la espera de la resolución definitiva de un procedimiento disciplinario que se le abrió tras la operación de la UCO en la que resulto detenido su estrecho colaborador Koldo García.

Antes de que se conociera la apertura del expediente, el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, en declaraciones a los medios en el Congreso, negó tajantemente que Díez trabajase para él. «Por supuesto que no», contestó taxativamente a la pregunta de si la militante cántabra había recibido instrucciones de la dirección nacional, informa Patricia Romero.

Entre los dirigentes socialistas, actuales y pasados, consultados hay desde quien afirma no haber visto nunca a Díez, a quien reconoce haberla tratado, como la citada Narbona o el portavoz parlamentario y exlehendakari Patxi López (Díez es natural de Portugalete, en Vizcaya) o a otros que en su día ocuparon puestos de responsabilidad que la tienen por una persona próxima a algunos dirigentes actuales. Desde la actual cúpula socialista se habla de una nueva 'Pequeño Nicolás' o incluso se la compara con 'El Bigotes' de la Gürtel para intentar devaluar su conexión con Ferraz.