Los okupas pasan de la algarada a la intimidación personal

«¿Dónde está Manuel Bravo Solano ? Iremos a buscarlo. Él es responsable del desalojo», denuncia el cartel con el que los okupas anuncian la movilización. La cita será a las seis de la tarde y el colectivo, que pide a los asistentes que vistan de rojo y blanco, anunciará el lugar de la convocatoria una hora antes.

El colectivo okupa, de hecho, lleva tiempo tildando a Bravo de «especulador de profesión» y ayer recordaba en su blog -que junto con las redes sociales está siendo su única vía de comunicación- que tiene «un oscuro conglomerado de empresas que se dedican a la especulación inmobiliaria». El Ayuntamiento de Barcelona , de alguna forma, también señalaba ayer a la propiedad tras comentar que se plantearon la compra del local pero que pedían un precio «desorbitado», de más de 500.000 euros. A pesar de la polémica, los propietarios no han querido manifestarse. ABC intentó entrar en contacto ayer con ellos por varias vías y no hubo respuesta.

A la espera de la protesta de esta tarde, el colectivo acudió ayer por la tarde a otra manifestación celebrada también en el barrio de Gracia, en este caso contra la extradición de una joven que fue detenida el 13 de abril en una casa okupa de Barcelona y a la que se acusa de haber participado en asaltos a bancos en Alemania. Al cierre de esta edición no se habían producido altercados.

Por otro lado y a raíz del debate sobre la okupación abierto por el centro desalojado de Gracia, los bienes inmuebles que acumulan los diputados de la CUP en el Parlamento catalán se han convertido en el foco de una nueva controversia, especialmente después de que su diputada Eulàlia Reguant viera con buenos ojos la okupación de algunas segundas residencias.

Tras sus palabras, empezaron a correr por las redes sociales las declaraciones de bienes de algunos diputados «cuperos», entre las que destaca la de Benet Salellas , con 11 propiedades -dos viviendas, tres locales y seis fincas rústicas-. Salellas puntualizó que su familia lo había ganado a costa del trabajo y que él lo recibió como herencia, tras quedarse sin abuelos ni padres con 30 años.