Bajo custodia policial la dueña del bar donde se originó el incendio de Barcelona que ha afectado a ocho edificios

Los heridos -otros dos menos graves y una leve- han sido trasladados también a un centro hospitalario y 34 personas más han sido atendidas y dadas de alta 'in situ', por inhalación de humo . Las llamas ya se han extinguido, aunque en la zona aún trabajan 13 dotaciones de los Bombers de Barcelona, y los Mossos ya están realizando la primera inspección ocular.

Según ha explicado el jefe de unidad los bomberos, Víctor Molinet, el incendio, que ha comenzado en el inmueble de la calle València 73 poco antes de las cuatro de la madrugada, ha producido una explosión con «bolas de fuego» , que han hecho que las llamas se extendiesen a otras fincas colindantes.

Pasadas las ocho de la mañana, Molinet ha detallado que los vecinos desalojados están «volviendo progresivamente» a los inmuebles desalojados. El más afectado es la del 73 de la calle València, donde se encuentra el bar donde se ha originado la explosión. Desde el exterior se aprecia el mobiliario quemado, y restos de bebidas.

Por el momento, los efectivos de emergencia evalúan si se han producido afectaciones estructurales en los edificios. Los residentes en el 90 de la Avinguda Roma sí podrán acceder durante la mañana a sus casas, a pesar de que ha habido «incendios de cierta importancia» en dos pisos.

Por su parte, el teniente de alcalde de Barcelona, Albert Batlle, ha detallado que el local incendiado iba a ser precintado de forma cautelar el pasado viernes tras varias quejas de vecinos por las «molestias» que originaba, aunque ha declinado entrar en más detalles.

Este cierre provisional no se ejecutó ya que al llegar al lugar, los funcionarios encontraron el local «sin actividad». Es decir, cerrado. Una de las hipótesis con las que trabajan los investigadores es que hubiese sido su propia dueña quien haya prendido fuego al bar esta madrugada . Según algunos vecinos han manifestado esta mañana, la mujer había amenazado con ello en varias ocasiones.

Fue el pasado 1 de abril cuando varios vecinos del inmueble se personaron en una comisaría de la Guardia Urbana para quejarse de las «molestias» y «problemas de convivencia» que ocasionaba la mujer al frente del establecimiento. Ante el relato de los residentes, una semana después, los agentes realizaron la inspección del local y acordaron su cierre provisional tras detectar problemas de «salubridad». En ningún caso, puntualizó Batlle, la Policía detectó «nada que pudiese hacer prever que se produciría un incidente de esta gravedad».

De hecho, la Urbana no llegó a precintarlo –los agentes solo levantaron acta– porque su titular no lo volvió a abrir, pero algunos vecinos relataron que ésta ya había amenazado con incendiar el local, que había alquilado solo hace cuatro o cinco meses.

Para escapar de las llamas, varios residentes en el edifico de Valencia 73 tuvieron que refugiarse en la azotea. Los bomberos los evacuaron por la fachada ya que no pudieron entrar en el inmueble. La portería quedó destrozada y no era accesible.

«Momentos interminables» y « un noche muy angustiosa », es como describen lo ocurrido algunos residentes en el inmueble, que además relatan que hace un par de semanas, la mujer empapeló las paredes del bar con periódicos embadurnados de aceite, con la intención de prenderle fuego. Cuando los efectivos de emergencias llegaron al lugar del suceso la pasada madrugada, la encontraron herida de gravedad en el exterior del bar. Será la investigación en curso la que determinará si originó el fuego.