Un vuelo con destino Barcelona da media vuelta por la diarrea de un pasajero

Al llegar a Atlanta de nuevo, varios trabajadores desinfectaron la aeronave durante horas. Además de esto, la aerolínea se vio en la necesidad de encontrar una nueva tripulación para el vuelo. Afortunadamente para los pasajeros, el vuelo no fue cancelado y después de un retraso de poco más de cinco horas, finalmente despegó a las 2.57 horas.

El avión aterrizó, finalmente, en Barcelona a las 17.10 horas, ocho horas después de la hora de llegada programada, que era a las 9.10 horas. El vuelo de regreso, DL195, también experimentó retrasos significativos. Inicialmente programado para partir de Barcelona hacia Atlanta a las 11.25 horas, finalmente despegó a las 19.23 horas.

Este incidente se suma a una lista de casos escatológicos en la industria de la aviación, como un vuelo de United Airlines desviado en 2018 debido a un pasajero que sufrió un caso parecido en los baños del avión y otro incidente de Delta en el que un asiento estaba cubierto de excremento de un vuelo anterior debido a un «perro de apoyo emocional enfermo».

En 2021, en el Reino Unido, un hombre sufrió una desagradable experiencia al ser alcanzado por desechos de un avión que pasaba mientras estaba en su jardín trasero en un día de verano. Estos eventos inusuales destacan los desafíos imprevistos a los que a veces se enfrentan las aerolíneas y sus pasajeros.