La denominada operación «Busza» arrancó a principios del mes de abril tras la denuncia presentada por dos menores de edad por una supuesta agresión sexual ocurrida en una parada de autobús urbano, donde el autor se hizo pasar por agente de policía y las realizó un cacheo.
Además, dentro del vehículo ocurrió otra agresión sexual, bajándose el varón ahora arrestado cuando se percató que la víctima estaba llamando al 112 para denunciar lo ocurrido.
Tras la investigación, los agentes pudieron localizar al individuo, vecino del municipio vallisoletano, al que además de las supuestas agresiones sexuales la Guardia Civil le atribuye otro delito de usurpación de funciones públicas al haber fingido ser policía.
Pero, además, tras realizar varios cotejos, se identificó al arrestado como supuesto autor de otra agresión sexual a una mujer en un autobús urbano ocurrido el pasado mes de marzo, de un delito de estafa realizado a un taxista por no abonarle el trayecto, de otro de daños en un buzón de un vecino de Arroyo de la Encomienda y de un hurto de colonias por valor de 400 euros aproximadamente ocurrido en un establecimiento de un centro comercial del alfoz de Valladolid. También le constan constándole varios antecedentes policiales por hechos similares
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