Sanidad eleva al nivel 3 las medidas en Fuensalida por la expansión del coronavirus

También en la provincia de Toledo, la autoridad sanitaria ha prorrogado las medidas de nivel 3 en Illescas y Yuncos, mientras que mantiene las de nivel 2 en Seseña y Ugena.

El Ayuntamiento de Fuensalida pide en sus redes sociales que se extreme la precaución «y sigamos escrupulosamente las medidas de distanciamiento , uso obligatorio de mascarilla y la recomendación de limitar los encuentros sociales a un máximo de 10 personas».

Desde la Delegación provincial de Sanidad se ordena el cierre de hogares de jubilados, centro de día y centros colectivos de sociedades recreativas y culturales. Igualmente, se prohíbe las visitas en residencias de mayores, viviendas tuteladas de mayores y centros sociosanitarios en los que residan personas consideradas vulnerables.

También se suprime el servicio de barra en todos los bares, restaurantes y otros establecimientos de hostelería de la localidad, mientras que el aforo en locales cerrados dedicados a esta actividad se reducirá al 30% del máximo que tuviera establecido previamente. Asimismo, las terrazas de bares y restaurantes reducirán su aforo al 50% del máximo, manteniendo en todo momento el resto de medidas establecidas en la normativa en cuanto a distancias de seguridad y agrupación.

Para garantizar el control de aforo y el mantenimiento de las medidas de seguridad, en establecimientos de hostelería queda prohibido el servicio a los usuarios que no se encuentren sentados en las mesas, tanto en el interior del local como en la terraza, así como el consumo de comidas y bebidas fuera de éstas.

Sobre las celebraciones posteriores a acontecimientos como bodas, comuniones, bautizos y otros de similares características, tanto en locales de hostelería y restauración como las que se lleven a cabo en otro tipo de instalaciones, tendrán limitado su aforo a 100 personas en espacios abiertos y 50 en lugares cerrados.

La Consejería de Sanidad ya venía prorrogando medidas especiales en Fuensalida desde el 23 de agosto para frenar la expansión del virus COVID-19, algo que no se ha logrado todavía, a tenor de la última decisión de la autoridad sanitaria.