El concejal de Urbanismo se desmarca de la moción sobre los pisos turísticos de Toledo y obliga al alcalde a utilizar su voto de calidad

No obstante, el pleno municipal ordinario celebrado este viernes en el Ayuntamiento de Toledo ha aprobado la moción presentada por el grupo municipal PP para instar a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha a regular y controlar los pisos turísticos en la ciudad, «ante la proliferación de viviendas de este tipo en Toledo, que está generando un impacto creciente sobre el equilibrio social, económico y urbanístico del municipio, especialmente en el Casco Histórico». Curiosamente, ha sido la única moción de todas las presentadas al Pleno que ha logrado salir adelante, aunque ha tenido que ser con el voto de calidad del alcalde de Toledo, Carlos Velázquez. El concejal de Urbanismo, Florentino Delgado, se ha desmarcado del voto favorable de su grupo, Vox, y ha sorprendido al anunciar su abstención porque la moción, a su juicio, «debería ser más madura» porque el sector necesita «una regulación más definida, más concreta, para que el Ayuntamiento se pueda ver beneficiada de ella y disponer de los mecanismos necesarios de control y de inspección». «Creo que se queda un poco corta o que alguna de sus formulaciones debería haber sido un poco más especificadas», ha dicho y ha justificado su abstención porque «este grupo tiene libertad de voto y podemos optar por la vía de la lealtad institucional el que quiera utilizarla y el que no, votar libremente lo que entienda más conveniente».

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Sobre la moción, que ha sido rechazada por PSOE e IU, el concejal de Turismo, José Manuel Velasco, ha explicado que si bien el turismo constituye uno de los principales motores económicos de nuestra ciudad, su crecimiento desordenado puede derivar en procesos de gentrificación, aumento del precio de la vivienda, pérdida de vecindario y deterioro de la convivencia ciudadana.

Velasco ha dicho que Toledo, como Ciudad Patrimonio de la Humanidad, requiere un tratamiento específico que permita compatibilizar el desarrollo de la actividad con la protección de su tejido residencial, patrimonial y social. Para ello, «es imprescindible contar con herramientas normativas y de control eficaces sobre el uso turístico de las viviendas», por lo que la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, en virtud de su competencia exclusiva en materia de turismo, y como titular del Registro de Empresas y Establecimientos Turísticos, «es la administración competente para regular, autorizar, registrar e inspeccionar las viviendas de uso turístico en la región. Sin embargo, en la actualidad, no existe una normativa autonómica específica que permita un control riguroso y eficaz sobre estas actividades en entornos urbanos sensibles como el nuestro.

Así, tras aprobarse la moción, el Ayuntamiento va a reclamar a la Junta la creación de un régimen sancionador efectivo contra aquellas viviendas turísticas que operen fuera de la legalidad o que incumplan los requisitos establecidos en la normativa vigente. En este sentido, el Partido Popular exige la colaboración interadministrativa entre la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y los ayuntamientos, para que se reconozca la potestad municipal para ordenar el uso del suelo, establecer zonas de saturación turística, y acceder a los datos del registro para facilitar su control y fiscalización local..