Homenaje del mundo de la cultura a un «apasionado de la letra impresa»

Quizá la humildad de González-Calero, que huye de todo reconocimiento público, propiciaron que este homenaje, celebrado en el campus de la UCLM en Ciudad Real, supusiera para él una auténtica sorpresa, algo inesperado, un acto en el que estuvieron presentes los expresidentes de Castilla-La Mancha, José Bono y José María Barreda ; el rector honorario de la Universidad regional, Luis Arroyo, y la filósofa Amelia Valcárcel, entre una treintena de personas relacionadas con el mundo de la cultura como José Luis Sobrino, Isidro Sánchez, José Rivero y Oliva Blanco , su esposa, que intervinieron en un acto que fue presentado por la periodista Mireia Morollón.

Aquella revista nacida en 1980 se retomó en 1993 como ‘Añil’, que publicó treinta números, hasta que en 1998 apareció Almud Ediciones de Castilla-La Mancha , la editorial que sacado a la luz 200 títulos de temática regional y local, y que incluso en estos tiempos marcados por la pandemia del coronavirus ha sido capaz de publicar 20 título s, 16 en 2020 y 4 en lo que llevamos de 2021.

El homenaje a Almud se convirtó en un acto de agradecimiento a toda la vida de un hombre «generoso» trabajando por la cultura «Nos pusimos a las órdenes del capitán, que era Alfonso» , recordó Isidro Sánchez, profesor de Historia Contemporánea en la UCLM hasta su jubilación en 2013 y actual profesor colaborador honorífico en la universidad.

El expresidente de Castilla-La Mancha, José Bono , se refirió a él como «un gran amigo y una gran persona», y destacó que González-Calero fue el primer director general del Libro , encumbrando desde este cargo el peso cultural de la región. Su sucesor al frente de la Junta de Comunidades, José María Barreda , se refirió a él como «este apasionado de la letra impresa» y subrayó su labor «ingente» por la cultura de la región. «Gracias a él conocemos mucho mejor nuestro pasado y sabemos mucho más de nuestra cultura». Barreda recordó también el papel del ‘alma matter’ de Almud Ediciones en la lucha por conseguir que el Alcázar de Toledo , con las connotaciones históricas asociadas a la guerra civil, albergara lo que hoy es la Biblioteca de Castilla-La Mancha , un esfuerzo que compartió con su gran amigo y director más tarde de este centro cultural, el recordado Juan Sánchez .

El homenajeado, que no esperaba un reconocimiento enfocado a su persona y pensaba que era un acto colectivo sobre la editorial, recordó también a Juan Sánchez, fallecido en septiembre de 2019, que «ha jugado un papel muy, muy importante en esta región». «Hemos sido cómplices en un montón de cosas y me da muchísima rabia que no pueda estar con nosotros hoy», dijo un emocionado González Calero en su intervención.

Con respecto a su trabajo en Almud, señaló que «lo que hemos hecho es demostrar que se pueden hacer libros sobre esta región y que todavía hay muchas cosas y muchas historias que contar . El camino está abierto y hay que continuarlo, con independencia de quién lo haga».

Más tarde, en sus redes sociales, González-Calero expresó su agradecimiento «a todos los que hicisteis posible el homenaje a Almud Ediciones que al final se centró, más de la cuenta, en un servidor. Los sentimientos se agolpaban a medida que iba oyendo palabras y testimonios, y al final yo no era más que un amasijo de emociones, difícil de desanudar. En resumen, un apretón de emociones y sensaciones, de reconocimiento por un trabajo que yo he hecho por simple convicción y cariño hacia mi tierra , Castilla-La Mancha, en estos veintitrés años».

--