Muere de al menos once puñaladas un niño en Mocejón (Toledo): «¡Qué hacemos ahora sin él!»

El chaval estaba jugando al fútbol con otros niños cuando, sobre las 9.45 horas de esta mañana, un hombre con el rostro tapado con un pañuelo llegó armado y cargó contra un grupo de personas que salió corriendo, aseguraban a este periódico algunos vecinos que se encontraban en las inmediaciones de las instalaciones deportivas. El atacante fue hacia el grupo de Mateo, que cayó herido de muerte en la banda del campo de fútbol cercana al graderío.

Cuando los servicios de emergencias llegaron hasta el menor, ya se encontraba en parada cardiorrespiratoria. Los sanitarios trataron de reanimarlo, le practicaron todo tipo de maniobras e incluso había un helicóptero preparado para su traslado a un hospital, pero el niño murió. Mateo habría cumplido doce años en octubre.

Aunque el horario de la puerta indica que abre de 7:30 a 00:30 en verano, los vecinos aseguran que el campo estaba cerrado y que los niños y el agresor se colaron por una valla rota.

Con el niño en parada cardiorrespiratoria, la alcaldesa, Conchi Cedillo, llegó a las instalaciones y una guardia civil le confirmó después la muerte de Mateo. Una docena de patrullas de la Guardia Civil, además de agentes de paisano, se movilizó en la Operación Jaula para tratar de capturar al sospechoso. También se incorporó un helicóptero del instituto armado. El atacante habría huido en un Ford Mondeo viejo y de color gris.

El polideportivo cuenta con una cámara con giro de 360 grados, arreglada hace unos días, y el municipio tiene en las entradas y salidas cámaras de seguridad instaladas por el ayuntamiento con lector de matrícula, que se espera sean de ayuda para arrestar al atacante.

La familia del menor se enteró de su muerte en el lugar de los hechos. «¡Qué hacemos ahora sin él!», se lamentaba uno de ellos al conocer la trágica noticia. «Le podía haber tocado a cualquiera», repetían entre lágrimas unas vecinas a las puertas de las instalaciones.

A las siete y media de la tarde, se convocó una concentración a las puertas del consistorio para condenar el crimen, y el ayuntamiento ha decretado tres días de luto oficial. «El dolor de la familia es inimaginable, pero todo el pueblo nos unimos a ese dolor incomparable», manifestó la alcaldesa y presidenta de la Diputación de Toledo en una nota de prensa. Numerosos miembros de su equipo de Gobierno en la institución provincial asistieron a la concentración de este tarde para «condenar enérgicamente el asesinato» de Mateo, un niño «superbueno, supercariñoso». El Juzgado de Instrucción número 3 de Toledo ha decretado secreto de las diligencias.