ECONOMÍA
La guerra arancelaria de Trump 'golpea' al vino y queso canario
El consejero de Economía advierte que serán dos sectores a los que afectará los nuevos impuestos estadounidenses y que se estudian medidas de control
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Brindis con vino canario y un atardecer en Tenerife
La guerra arancelaria que ha iniciado el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ya ha viajado por el Atlántico impactando en Canarias, que teme el efecto que puede tener sobre importaciones y exportaciones, y especialmente en los mercados del vino y queso de ... las islas.
El vicepresidente y consejero de Economía del Gobierno de Canarias, Manuel Domínguez, ha advertido que la economía canaria «sí se verá afectada« por los aranceles del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de forma «indiscutible». La afección, ha dicho, será no solo por el número de exportaciones que pueda llevar a cabo Canarias hacia Estados Unidos, sino también porque otros suministradores de servicios a Canarias, que tienen «una relación mucho más directa», podrán «ver mermado su negocio, y eso llevará un incremento de costes».
Ha adelantado que el sector más afectado será el de productos primarios como el vino y la producción de queso que «en estos momentos había encontrado en Estados Unidos un nicho de mercado oportuno que era creciente«, y con una »demanda en alza«.
Ha confesado que lo más que le «preocupa» es que los precios de los productos que se importan en Canarias se incrementen y supongan un paso atrás en las políticas de contención de la inflación y de mejora de los precios de la cesta de la compra, ya que «un incremento en los precios de los productos importados, tendría afección directa» en los bolsillos de los isleños.
Ha adelantado que estará «muy atento» a todo lo que conllevará el pronunciamiento de Trump y también «a las medidas que pueda implementar el Gobierno de España».
Domínguez ha considerado que el presidente de España «debería llamar a todos los presidentes autonómicos para una decisión conjunta», ya que la afección que pueda tener en una comunidad autónoma u otra «no es la misma», y las políticas que se lleven a cabo «no deberían de ser lineales». En esta línea, ha pedido seguir «con mayor exactitud y mayor precisión» la realidad de cada región, a la vez que ha adelantado que «va a estudiar» cuál es la «afección real» desde Estados Unidos y «confía» en que «el gobierno central nos escuche».
«Está claro que no vamos a dejar solos a los sectores en estos momentos y les ayudaremos a tomar decisiones pertinentes, les escucharemos y en función de ello, tomaremos medidas«.
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