Seis detenidos en Zaragoza por violar en grupo a una mujer y tenerla encerrada varios días

El juzgado decidió abrir una investigación específica sobre esos videos y, según han destacado fuentes policiales, «los agentes encargados de analizar las imágenes descartaron desde un primer momento que pudiera tratarse de una relación con consentimiento por parte de la mujer».

Los videos de esas agresiones sexuales fueron encontrados en los teléfonos móviles de los cabecillas de esta banda latina asentada en Zaragoza.

Las fuerzas de seguridad han logrado identificar y localizar a la víctima, así como a los seis hombres que participaron en la violación. Tres de ellos llevan varios meses en prisión , tras haber sido detenidos en la operación del pasado marzo. Los otros tres, que también pertenecen a la banda Dominican Don’t Play, han pasado ahora a disposición judicial.

Los seis hombres que aparecen en esos 16 videos están acusados de delitos de detención ilegal, agresión sexual, contra la integridad moral, lesiones, revelación de secretos y amenazas .

Según han informado fuentes policiales, la víctima estuvo retenida contra su voluntad durante más de dos días. La tuvieron encerrada en una habitación, y se cree que sus captores le suministraron «sustancias de sumisión química» para anular su voluntad y facilitar así la agresión sexual en grupo.

Las mismas fuentes han explicado que la mujer fue retenida y violada en junio del año pasado. Y los videos fueron hallados en los teléfonos móviles de varios de los 15 pandilleros latinos que fueron detenidos el pasado mes de marzo en Zaragoza. Un par de meses después fueron detenidos ocho menores de edad, también por su pertenencia a esa banda. Y a ellos se suman los tres que aún no habían sido detenidos y que están relacionados con la violación grupal.

En total, por tanto, en los cuatro últimos meses la Policía ha detenido en Zaragoza a 24 integrantes de los Dominican Don’t Play. La banda reclutaba a jóvenes menores de edad para integrarlos en esta organización criminal. Según los investigadores, los responsables de la banda les encomendaban la comisión de delitos contra el patrimonio y tráfico de drogas para financiar a la organización, además de obligarles a participar en peleas contra bandas rivales.