Alvise somete a su número dos al acoso de sus seguidores y le exige que entregue el acta de eurodiputado por «traicionar al votante»

La tormenta en Se Acabó La Fiesta (SALF), la agrupación de electores con la que Alvise Pérez logró más de 800.000 votos y tres eurodiputados en los últimos comicios europeos, no amaina. Si esta semana el propio Alvise acusó a sus dos compañeros, Diego Solier y Nora Junco, de haberse dejado comprar por un lobby armamentístico y estos anunciaron que estudiarian acciones legales contra él, este miércoles por la noche Alvise decidió señalar públicamente a Solier en su transitado canal de Telegram.

La relación entre los tres miembros de SALF, de por sí tensa en los últimos meses, terminó de resquebrajarse en los últimos días cuando, en un podcast, el cabeza de lista de la agrupación reprochó a Solier y Junco, miembros del grupo ECR, haber roto la disciplina de voto. Según Alvise, los tres venían votando en contra del rearme europeo (votaron a favor del Libro Blanco), hasta que en las últimas votaciones sus compañeros decidieron apoyar algunas de esas propuestas. En ese punto, el líder de SALF deslizó que quizás Solier y Junco se habían vendido a algún 'lobby' armamentístico. «Yo no sé si ha venido un 'lobby' por detrás y ha comprado. ¿Sabéis el poder que tiene el lobby europeo?», dijo.

En un comunicado, el número dos de SALF denunció que esas acusaciones «carecen de todo fundamento y están totalmente alejadas de la realidad» y anunció que tanto él como Junco estaban «estudiando opciones legales» en respuesta a esas «afirmaciones difamatorias». Anoche, en su canal de Telegram, Alvise respondió lanzando a sus casi 700.000 seguidos en esa plataforma contra Solier. Compartió su correo electrónico y sus redes sociales, que se han llenado mensajes tales como «rata» y traidor», y advirtió de que le usaría de «ejemplo» de qué le ocurre a quienes «se aprovecha de un acta para traicionar al votante».

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Alvise Pérez, cuya incoporación al grupo ERC, al que pertenecen los otros dos eurodiputados de SALF, no se llegó a formalizar y sigue figurando como no adscrito, explicó que Solier fue elegido en la agrupación de electores como el número dos en la lista por su currículum y su «supuesta independencia». Menos de un año después de que tomara posesión como eurodiputado, le ha exigido su dimisión y la entrega del acta por su «evidente deslealtad al votante y al proyecto de SALF».

Alvise acusa a Solier de haber conspirado en su contra y de haber pedido amparo a Vox y al PP. «Tras reunirse con diversos círculos de influencia y altos cargos del PP, decidió votar a favor del rearme europeo y darle 800.000 millones de euros a la Comisión Europea. Cuando Alvise Pérez le pidió explicaciones, Diego le bloqueó en toda red social sin motivo alguno y no responde a sus mensajes desde hace más de un mes», reza parte del mensaje en su canal de Telegram.

«Quien piense que como líder de SALF voy a callarme porque sea uno de los más de 60 candidatos de nuestra propia lista de electores, está muy equivocado. Yo no entro en política para cubrir al que nos falle, porque entonces no cambiaremos nada y seríamos como todos los demás. Vamos a usar a Diego Solier como ejemplo de qué le ocurre a la gente que sin ser votado por nadie se aprovecha de un acta para traicionar al votante», concluye.