La crisis catalana desmonta la estrategia de Iglesias y abre dos frentes en Podemos

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El domingo, el líder de la formación dio un golpe de mando después de que el líder de Podem, Albano Dante Fachin, dejara abierta la puerta a la posibilidad de un pacto electoral con partidos independentistas, e informó a su dirección de su voluntad de proponer la convocatoria de una consulta entre los inscritos de Podem para decidir si concurren en alianza electoral con el partido de Colau. Esto supone de facto sortear a la dirección autonómica, Fachin incluido, e intervenir a su marca en Cataluña.

Ayer, Iglesias convocó una reunión urgente de «Rumbo 2020», el «gobierno en la sombra» con el que cuenta el líder de Podemos para analizar la actualidad y tomar decisiones estratégicas. Allí volvió a mostrar mano dura ante el otro frente que también se le abrió el domingo: el reconocimiento público, a través de un comunicado, de la corriente Anticapitalista de la «nueva república catalana». Iglesias cargó duramente contra el escrito, del que aseguró que se encontraba « políticamente fuera de Podemos ».

A esta reunión del gobierno en la sombra también acudió el líder de la corriente discordante, Miguel Urbán , que además es eurodiputado de Podemos y forma parte de la ejecutiva del partido. Urbán decidió guardar silencio ante la crisis y evitó valorar el comunicado. Sin embargo, fuentes de los Anticapitalistas quisieron matizar que el objetivo del escrito no era el de reconocer un nuevo estado, algo que, a su juicio, deben hacer otros estados, y no formaciones o corrientes que pertencen a partidos políticos, pero sí que pretendían dar un espaldarazo a los independentistas ante la aplicación del 155.

Iglesias lanzó una advertencia a los de Urbán. A la pregunta sobre qué significa estar «políticamente fuera de Podemos», el secretario general contestó con un escueto, pero directo, «eso lo tendrán que decidir los órganos de Podemos», y añadió: « No somos independentistas ».

También se pronunció ayer sobre el golpe de mando en Podem . «Ha habido posiciones de compañeros que han generado mucha alarma en los últimos días», aseguró. «Son posiciones legítimas, pero que seguramente están más cerca de otras opciones políticas que de la nuestra, y en Podemos las alianzas electorales las deciden los inscritos», advirtió Iglesias. Más duro fue Juan Carlos Monedero, que a pesar de estar fuera de los órganos oficiales del partido, es uno de los principales apoyos de Iglesias fuera de las instituciones y uno de los miembros del gobierno en la sombra. El cofundador de Podemos calificó a los anticapitalistas de «marineros desrumbados que no saben a qué puerto van» y le enseñó la salida a Fachin: «Últimamente hemos visto a Albano Dante de la mano de otros partidos políticos, y haría muy bien acudir a ellos. No tienes por qué estar en un partido habiendo otros que te ofrecen una solución a los que planteas».

La deriva «indepe» de Fachin choca también de pleno con la estrategia electoral que querría Podemos para su marca en Cataluña. Iglesias y el partido abogan de manera nítida y sin matices por integrarse en el proyecto de Catalunya en Comú que lideran la alcadesa de Barcelona, Ada Colau, y el diputado Xavier Domènech.

De hecho, Domènech, al que su partido quiere como candidato para las elecciones catalanas de diciembre, participó ayer en la reunión de «Rumbo 2020» de Podemos, en una nueva muestra de la sintonía entre el partido morado y los «comunes». De manera explícita volvió a quedar claro que el referente del partido de Iglesias es Catalunya en Comú y no Podem. Partidos como ERC ya están lanzando guiños para atraerse a Fachin. Ruptura inminente.