Ciudadanos destituye al secretario de Organización en el País Vasco por planear un «trasvase» al PP

Según fuentes de la dirección nacional de Cs consultadas por ABC, recibieron una serie de denuncias de sus afiliados sobre una actividad desleal del secretario de Organización autonómico.

Estos testimonios de los que hablan fuentes de Cs alertaron de los presuntos intentos de Gómez Calvo de convencer a los militantes de Cs en la comunidad vasca de que cambiasen el carnet naranja por el popular .

Un intento de «trasvase» totalmente injustificado y que ha provocado esa «pérdida de confianza». La destitución, adelantada esta mañana por «El Correo», se enmarca en un contexto en el que el PP garantiza que se están produciendo conversaciones «discretas» con Cs para convertir en realidad España Suma.

Desde el partido niegan categóricamente ninguna reunión sobre este asunto y mantienen, al menos en público, un no rotundo a la iniciativa del PP.

También en el País Vasco, región donde ni PP ni Cs obtuvieron representación el 28-A al castigarles especialmente la fragmentación del centro-derecha. En Álava el PP perdió el último escaño por un puñado de votos que regalaron la última acta de esta circunscripción a EH Bildu.

Por el momento, Gómez Calvo no ha dejado la militancia de Cs y, aunque los Estatutos del partido prevén medidas para su expulsión, solo se le ha retirado de su cargo.

En Ciudadanos Euskadi bailan entre la confusión y el tedio. Desde el seno de la formación naranja aseguran que, a «nivel oficial», no se ha producido ningún contacto con el PP vasco de cara a la conformación de una alianza electoral. Y si Javier Gómez habló con los populares, les es «desconocido», apuntan.

Lo cierto es que la destitución de Gómez, que seguirá como coordinador de Ciudadanos en Álava, ha generado sorpresa en la dirección del partido. «Es algo que no parte de nosotros, a día de hoy no sabemos muy bien qué es lo que va a pasar», destacan las fuentes oficiales, que sin embargo rehúsan cerrar totalmente la puerta a un futuro acuerdo: «Para que se pueda descartar algo tiene que haber existido ese algo» , apuntan.

En este sentido, consideran que sería nada menos que una «negligencia» no «sentarse a escuchar» una hipotética oferta de los populares vascos en el caso de que estos la presenten. Aunque el acuerdo, matizan, «puede llegar en multitud de términos», lo cual deja en el aire la posibilidad de acercar posturas tras la celebración de los comicios.

Una lectura muy distinta hacen desde las filas del PP vasco. El presidente de esta formación en Álava, Iñaki Oyarzábal , advierte de una campaña de «desprestigio» contra Gómez: «Es absolutamente falso que haya promovido un trasvase o afiliación», asevera en declaraciones a ABC. Por otro lado, el popular subraya que le consta que el dirigente naranja «no iba por libre» , dado que tenía el respaldo de otros líderes del partido.

Según explica Oyarzábal, los contactos entre ambas formaciones estaban «muy avanzados», algo de lo que era consciente el propio Pablo Casado, principal valedor de la marca «Suma». «Las reuniones se iniciaron hace dos o tres semanas —explica el alavés—. Ellos nos decían que lo venían barruntando desde final del verano y nos llamaron».

Durante este tiempo hubo «intercambios de papeles» para la conformación de un acuerdo que implicaba que Ciudadanos Euskadi asumiera las «singularidades» de la comunidad autónoma vasca. El documento, señala Oyarzábal, es de hecho muy parecido al de Navarra, «pero con algunos retoques».

Posteriormente, ha hablado el presidente del PP en la comunidad, Alfonso Alonso , que ha asegurado en el Parlamento vasco que las conversaciones con Gómez Calvo estaban muy avanzadas, pero no para un «trasvase» de afiliados, sino para una coalición que se iba a llamar «Vascos Suman» . Según el dirigente popular, cuando ayer el ex secretario de Organización regional de Cs comunicó los avances a la dirección nacional de su partido, esta cometió el «error» de cesarlo «fulminantemente».

En declaraciones a los medios de comunicación en el madrileño barrio de Vallecas, sin embargo, el presidente de Cs, Albert Rivera , ha negado de forma tajante que exista «ningún otro motivo» en la destitución de Gómez Calvo. «Alguien quería irse a otro partido político y, evidentemente, nadie puede ser militante de Cs si es militante de otro partido», ha despachado en una escueta respuesta.