Iglesias conduce a Teresa Rodríguez a abandonar Podemos

Durante toda la semana, el sector Anticapitalista ha mantenido un intenso debate con los grupos que tiene esparcidos a nivel nacional, aunque más asentados en Andalucía y Madrid, que ha terminado en un acuerdo para no presentar candidatura en la Asamblea de marzo, según adelantó Cuarto Poder. Pero aunque existe una «mayoría clara», la decisión final se tendrá que oficializar en la Coordinadora Confederal Anticapitalista que se celebrará el domingo 16 de febrero.

Asimismo, l a discusión de abandonar el partido , según explican fuentes de Podemos a ABC, ya lleva un año encima de la mesa de Rodríguez y se formalizará o no en la Conferencia del próximo 28 de marzo. El debate está motivado principalmente por rechazar la estrategia de Iglesias de entrar en el Gobierno con el PSOE, que además ha sido apoyada por Izquierda Unida. Un planteamiento en contra del criterio de Anticapitalistas, que considera que es limitarse a una posición «subalterna».

Sin la candidatura alternativa de los «Anticapis», como sí ocurrió en Vistalegre I (2014) y Vistalegre II (2017), Iglesias llegará a la tercera Asamblea sin oposición. El círculo de poder del secretario general es hoy mucho más pequeño que hace tres años , los díscolos, miembros indisciplinados, han sido apartados por desconfianza o han abandonado por ser empujados al ostracismo.

Con el adelanto de la Asamblea, que busca rentabilizar su vicepresidencia, entre otros extremos, Iglesias le señala a Rodríguez su camino y la desarma a pocos meses de tener que renovar su liderazgo en Andalucía. La dirigente crítica contaba con blindar su Secretaría en la Asamblea regional , que estaba prevista para marzo pero tuvo que aplazarse a mayo por el anticipo del cónclave nacional. Rodríguez verá, pues, como las bases andaluzas apoyan en marzo el proyecto de Iglesias en contra de su criterio.

De hecho, esta situación ya se produjo en noviembre: el 96 por ciento de la militancia andaluza avaló en la consulta el Gobierno de coalición entre PSOE y Unidas Podemos. Mientras, el partido ya trabaja a nivel interno para encontrar un perfil para su relevo. A menos de dos meses para celebrarse la Asamblea, por el momento, la dirección de Podemos no contempla rivales que hagan frente a Iglesias, que rentabilizará su entrada en el Gobierno y reforzará su liderazgo cuatro años más.

Fuentes del partido consideran que la fortaleza que ha logrado con la vicepresidencia desalienta el impulso del sector crítico. Subrayan además que a pesar de ello será un encuentro mucho más equilibrado que en Vistalegre II, donde las fuertes tensiones entre el sector oficialista y el errejonista complicaron la organización y llenaron la atmósfera de «toxicidad». Curiosamente, en aquella Asamblea de 2017 Rodríguez y Anticapitalistas cerraron filas con Iglesias. Hoy parece impensable.