La industria alemana pierde clientes
La producción industrial de Alemania cayó un 1,6% intermensual en diciembre y cierra 2023 en pleno descenso, un dato peor de lo previsto
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El sector industrial alemán lleva meses advirtiendo sobre una tendencia que ahora confirman las cifras. La producción industrial del país cayó un 1,6% intermensual en diciembre y cierra 2023 en pleno descenso, según publica la Oficina Federal de Estadística Destatis. Es un dato ... peor de lo previsto por los analistas sondeados por la firma Factset, que esperaban una caída de solamente el 0,35%, y el séptimo mes consecutivo de retroceso para este sector esencial de la primera economía europea. En noviembre, el retroceso fue del 0,2%, por lo que el ritmo de caída parece intensificarse.
Este dato se suma a la serie de malas noticias para la industria alemana. Los investigadores del Instituto Ifo de Múnich hablan abiertamente de una falta de pedidos que afecta a grandes sectores de la industria manufacturera y que se está convirtiendo en una carga cada día más pesada para la economía nacional.
En lo que respecta a los nuevos pedidos, la situación ha empeorado notablemente últimamente.«Casi ningún sector se salva de esto», explica en declaraciones a Die Welt Klaus Wohlrabe, responsable de estudios en el Instituto Ifo que señala que «la cartera de pedidos se está derritiendo». Según las comprobaciones del Ifo, el 36,9% de las empresas industriales alemanas se quejaron en enero de la falta de pedidos. Hace un año, sólo el 20,9% de las empresas expresaba esta misma queja.
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En esa concatenación de causas y efectos que es la economía, esta situación débil de los pedidos industriales avanza una producción débil en el futuro, lo que a su vez repercutirá en la disposición de las empresas a invertir y en el mercado laboral.
Es el preludio de la recesión. Y las que primero lo notan son las empresas, que no habían terminado de levantar cabeza desde la pandemia y la posterior crisis energética y que en muchos casos se ven ahora abocadas a la quiebra.
Se prevé un incrememto en insolvencias
La agencia de crédito Creditreform prevé, de hecho, un aumento significativo de las insolvencias de empresas alemanas en 2024. «En general, suponemos que las insolvencias seguirán aumentando el año que viene«, dice su director general,Bernd Bütow , que estima que 18.100 empresas en Alemania habrán solicitado la declaración de insolvencia a finales del año en curso, alrededor de una cuarta parte (23,5%) más que el año anterior, cuando la cifra fue de 14.660.
El director de Estudios Económicos de Creditreform, Patrik-Ludwig Hantzsch, avanza que, «basándonos en los datos actuales, alrededor de 20.000 es una cifra bastante realista« para 2024 y añade que »cada vez más empresas se hunden bajo la presión constante de los altos precios de la energía y los altos tipos de interés«.
El gobierno alemán es consciente de esta situación y de sus potenciales consecuencias, por lo que está trabajando a toda prisa en un mecanismo de alivio, una reforma del impuesto de sociedades en la que ya están de acuerdo los ministros de Economía, el verde Robert Habeck, y el de Hacienda, el liberal Christian Lindner, que reconoce públicamente el peligro para la economía alemana y declarado recientemente que «Alemania ha dejado de ser una sede de negocios competitiva».
Sería la primera reforma fiscal importante desde la década de 2000 y Lindner cuenta con un volumen de alivio de entre 6.000 y 7.000 millones de euros, según los primeros borradores. Pero de momento el canciller Olaf Scholz se muestra cauteloso y hay cierta resistencia en el interior de la 'coalición semáforo' a la supresión del recargo de solidaridad para las empresas.
Scholz prefiere concentrarse en hacer cumplir la Ley de Oportunidades de Crecimiento, que actualmente se está discutiendo en el comité de mediación del Bundestag y del Bundesrat, que en su opinión proporcionará a las empresas un alivio de entre siete y ocho mil millones de euros, pero Habeck ha advertido que los estados federados podrían reducir el volumen de la ayuda a 3.000 millones de euros, lo que, según sus palabras, equivaldría a un «efecto homeopático».
Menos exportaciones
En cualquier caso, el alivio a las empresas se ha convertido en una cuestión apremiante. Las recién publicadas cifras del comercio exterior de cierre de 2023 señalan que las exportaciones cayeron en diciembre un 4,6%. «Las cifras fueron significativamente más débiles de lo esperado», admite Marc Schattenberg, economista de Deutsche Bank Research.
El surco de las expectativas de exportación del Ifo para principios de 2024 es aún más profundo y sugiere claramente que se pueden esperar más vientos en contra.
«No es un buen momento para la economía alemana. Además de una disminución significativa de las ventas minoristas hay una disminución de las exportaciones», alerta Thomas Gitzel, economista jefe del VP Bank en Liechtenstein, que subraya que el superávit de la balanza comercial pasó de los 20.800 millones de euros en noviembre a los 22.200 millones de euros en diciembre.
La industria alemana pide pocos productos del extranjero porque la cartera de pedidos es escasa y especialmente los sectores que consumen mucha energía se quejan de la falta de encargos. El 53,3% de las empresas del sector del metal y papelero y el 40,6% de las del sector químico están dejando de recibir pedidos.
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