Último tren para el Madrid ante un Barça que puede sentenciar

Aterriza el Madrid a nueve puntos de distancia del líder con la losa de saber que nadie enjugó jamás más de ocho puntos a estas alturas. Si ganan, a seis puntos y con el 'goal average' a favor, la Liga se miraría ya con otros ojos y los nervios podrían tomar el puente aéreo e instalarse en la Ciudad Condal. Ese es el objetivo, sembrar dudas al equipo de Xavi, que aún no ha encajado un solo tanto de jugada en el Camp Nou. «Al Barça le tenemos que ver como un león, no como un gato. Si lo vemos como un gato igual parece que vamos a una fiesta. Y no, vamos a jugar contra un gran equipo y un partido importante. En estos partidos siempre hay miedo, claro, pero es normal. Son nervios, miedo... Para mí las dos horas antes son las peores», asegura Carlo Ancelotti, que añade: «Saldremos ofensivos».

Con la tranquilidad de no estar necesitados y vivir en una situación desahogada, el Barcelona prepara su partido con la esperanza de dar un zarpazo y dejar el título visto para sentencia, aunque desde el vestuario culé tratan de transmitir prudencia. «Creo que el partido está al 50 por ciento. Puede ser un poco más para nosotros porque jugamos en casa», asegura Xavi Hernández, que por primera vez se siente favorito. No obstante, el técnico catalán se mantiene fiel a su discurso. «En caso de ganar sería un golpe en la mesa. No sería definitivo pero sería fuerte. Pase lo que pase no será definitivo. Quedarán puntos y partidos difíciles. No quedará nada decidido», insiste.

El Barcelona no tiene a Pedri, que el pasado viernes se resintió y no entró en la convocatoria. Un contratiempo minimizado por el gran estado de forma de Araujo, marcador habitual de Vinicius con buenos resultados, y de Ter Stegen, que solo ha encajado ocho goles en los 25 partidos de Liga disputados hasta el momento. En el Camp Nou, donde solo le han batido una vez (fue el Espanyol y de penalti), es un valladar.

El Madrid podrá contar con todas sus estrellas. Benzema se ha recuperado sin problema del golpe sufrido ante el Liverpool el pasado miércoles, justo en la jugada de su gol. Y las sensaciones son buenas tras la victoria ante el conjunto inglés. También tras el último partido ante el Barcelona, en Copa, aunque éste acabó con derrota en el Bernabéu (0-1). Pero el Madrid supo someter a los culés y les arrebató de forma contundente la posesión, aunque no generaron ocasiones de gol. Esa es una de las características del nuevo Barça, su resiliencia y su capacidad de sufrimiento. «¿Qué pasa con el 1-0? Puestos a elegir prefiero un 4-0 o un 5-4, pero cuesta marcar goles. Ganar 1-0 es un resultado fantástico. Es una maravilla», defiende Xavi.