Francia: El tridente azul busca conquistar Rusia

En el banquillo continúa Didier Deschamps , que como jugador fue campeón del Mundo y de Europa con su país en 1998 y 2000, respectivamente. Su estilo, apoyado en el 4-4-3, cuenta con la aprobación general de la afición, pero en momentos decisivos suele pecar de prudencia y contención , características que lideraron su carrera de mediocentro defensivo. Deschamps lleva en el cargo desde agosto de 2012 y tiene contrato hasta la Eurocopa de 2020. De momento, su papel en grandes torneos es notable, pero sin títulos . Llegó a los cuartos de final en el Mundial de Brasil y fue finalista en la Eurocopa de hace dos años.

Sobre el verde, la selección «bleu» es una de las más completas del torneo , con físico, talento, poderío aéreo y mucho gol en la parte de arriba. Sus tres grandes estrellas son Antonie Griezmann, Kylian Mbappé y Ousmane Dembélé, pero en la columna vertebral destacan otros jugadores de la talla de Umtiti, Varane, Pogba, Kante, Mendy, Lemar o Tolisso.

El delantero del Atlético de Madrid es actualmente, detrás de los extraterrestres Cristiano y Messi, el tercer mejor jugador del planeta . Una temporada más, ha sido el futbolista más decisivo del conjunto rojiblanco, llevándole hasta la segunda plaza de la Liga y haciéndole campeón de la Europa League. En sus botas están muchas de las opciones de su país. Buscará redimirse de la final perdida en Francia en la Eurocopa de 2016, contra Portugal.

Mbappé es la otra gran joya del combinado francés . Su temporada en el PSG ha quedado señalada por el fiasco en la Champions ante el Real Madrid, pero sigue siendo un futbolista con una zancada, velocidad y remate de gran peligrosidad. A sus 19 años se presenta en Rusia como el segundo jugador más joven del Mundial , por detrás del mediocampista australiano Arzani, menor que él por tan sólo unos pocos días.

El tercer gran nombre de Francia es Ousmane Dembélé, enrabietado tras una temporada complicada en el Barcelona , donde ha sido castigado por las lesiones. El uno contra uno y la habilidad del extremo de Vernon será un arma clave para hacer daño a las defensas rivales. Llega a Rusia para ganar y demostrar que los 140 millones de euros que pagó el club catalán por su fichaje no son injustificados, y así ganarse una segunda oportunidad.