El Betis encarrila la clasificación con una goleada ante el Aris Limassol

Once esperado de Pellegrini, con rotaciones masivas en su equipo inicial, con Marc Roca de central y una nueva oportunidad arriba para Borja Iglesias en busca de su punto de inflexión ante un inicio de temporada poco favorable. Y el Panda se reivindicó e hizo añicos la losa que pesaba sobre sus hombros. Necesitó poco más de media hora para aprovechar una gran jugada por la banda izquierda. El centro de Abner, buscando a Borja, lo encontró en un desmarque prodigioso y el bético batió a Vaná Alves para encarrilar su clasificación para la la siguiente ronda.

Antes del gol del Panda pudo adelantarse el Betis con varias ocasiones claras. En el primer saque de esquina del partido (min. 6) el balón llegó a William Carvalho, cuyo su duro disparo lo despejó Vaná a córner. Acto seguido una doble ocasión de Rodri y Luiz Henrique (min. 7) que se topó con el portero del Limassol: otro córner. Y dos minutos después fue Abde el que pudo desnivelar el marcador tras recibir un balón en profundidad. La puesta en escena del Betis era excelente pero la actuación del portero chipriota estaba a la misma altura.

Las segunda parte comenzó con susto. Bengtsson, que acababa de entrar al campo marcó un golazo en el primer balón que tocó pero el VAR anuló el tanto por un fuera de juego milimétrico que el ojo humano era incapaz de ver en directo. El susto sirvió para espolear a los béticos, que se afanaron en intentar sentenciar el duelo. Pero algo había cambiado en le partido. El Betis se estaba desconectando, había salido del vestuario con dos marchas menos. El gol anulado y una ocasión de Babicka (min. 58), que casi sorprende a Claudio Bravo, provocó la reacción de Pellegrini, que dio entrada a tres titularísimos para buscar una reacción anímica: Isco, Ayoze y Guido sustituían a Guardado, Borja Iglesias y Rodri. Mejor prevenir que curar.

La intervención de Pellegrini dio resultado. Cinco minutos después de los cambios marcó Ruibal, entrando por la derecha. Jugada algo trabada del Betis, que cae a los pies del lateral y sin pensárselo suelta un zapatazo que le dobla las manos a Vaná. Respiraba el Betis, como el buzo que se deja caer sobre el suelo del bote tras haber estado rodeado por tiburones, y lo festejaba Ruibal metiéndose el balón bajo la camiseta. Y poco después Isco volvió a ser determinante al sufrir un penalti que concedió el VAR. Bonita imagen la de Isco dándole el balón a Fekir para que lanzara el penalti. Era el primer balón que tocaba el franco-argelino, que entraba en ese momento al campo. Lo falló. El portero adivinó su intención.

El que no falló fue Marc Roca, que anoto el tercero y dio tranquilidad a su equipo y a la afición. Fue un auténtico golazo. No arrojó la toalla el Limassol, que le puso pimienta al choque con un tanto de Kokorin. El Betis se había confiado y el problema prosiguió con una gran ocasión de Yannick Gomis a falta de cinco minutos que desbarató Claudio Bravo, aunque el portero chileno se lesionó en esa jugada. Tuvieron que vendarle el muslo y habrá que ver si podrá jugar el derbi. En la prolongación, Abde selló la goleada.