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ABC Cultural

Del aroma de Alejandro Mora a la casta indómita de Hortensio en Las Ventas

El novillero extremeño da una vuelta al ruedo, el premio que la presidencia no otorgó a un gran novillo de Guadaira

El deseo de los tres espadas en Madrid

Miguel Andrades, en un par de banderillas al sexto, Hortensio, que le hace una señal en la taleguilla PLAZA 1
Rosario Pérez

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Tardará mucho tiempo en nacer, si es que nace, un novillo como Hortensio. Qué prontitud, qué codicia. Inagotable la embestida de aquel huracán de fiereza indomable. Desde que apareció por chiqueros se vislumbró que Hortensio estaba llamado a ser 'alguien'. Colorado chorreado en verdugo, ... este número 42 de Guadaira lo pedía todo por abajo. No había un gramo de sus 492 kilos que no se moviera con casta. «¡Enhorabuena, ganadero!», gritó la afición que pedía la vuelta al ruedo para Hortensio. Pero el palco, a uvas, se guardó el pañuelo azul. Como si fuese fácil criar un animal así y todos los días saliera un Hortensio en Las Ventas...

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