Popeye saca músculo

El Salón del Cómic, que este año se celebra del 15 al 18 de mayo, se plega así ante uno de los iconos de la cultura pop más celebrados y recordados, un marinero fortachón y con una debilidad especial por las espinacas que, pese a nacer como secundario de la tira «Timble Theatre», protagonizada inicialmente por los hermanos Castor y Olivia Oyl, fue haciéndose con el protagonismo hasta acabar dándole nombre a la tira.

Precisamente a esos orígenes asociados a la viñeta es los que rebobina la cita barcelonesa para plasmar en una exposición cómics de diferentes épocas así como «merchandising» de época y actual. Y es que, por más que Segar, fallecido en 1938, solo pudiese vivir diez años junto a su célebre criatura, varios autores continuaron dando vida al marinero musculoso y malhumorado tras su muerte. Mención especial merece la aportación de aportación de Bud Sagendorf, quien se hizo cargo de la tira a los largo de 28 años, entre 1958 y 1986.

En la muestra del salón tampoco faltarán los secundarios que han acompañado a Popeye a lo largo de todos estos años, empezando por su eterna novia Olivia, el malhumorado Bluto (también conocido como Brutus), el glotón Pilón, el bebé Cocoliso o el extraño animal Eugenio el Genio (Eugene the Jeep).

Más allá de la viñeta, Popeye alcanzó su cota máxima de popularidad cuando, a partir de los años 50, la tira se convirtió en una serie de dibujos animados para la televisión. En 1980 el director Robert Altman dirigió la comedia musical «Popeye», película protagonizada por Robin Williams.

Asimismo, una escultura de Popeye de más de dos metros de altura, obra de Jeff Koons . será una de las estrellas de la subasta que la sala Sotheby's de Nueva York ofrecerá el próximo 14 de mayo. Su precio estimado: 25 millones de dólares (18 millones de euros). La pieza nunca había salido al mercado ni se había exhibido antes. Koons comenzó a introducir a Popeye en su trabajo hace casi quince años y durante la crisis financiera lo convirtió en el centro de una serie.

«La historia del arte pop empieza y termina con Popeye. Desde sus primeras representaciones por Roy Lichtenstein y Andy Warhol en los años sesenta, al actual crescendo tridimensional de Jeff Koons medio siglo después», recordó en un comunicado el codirector del Departamento de Arte Contemporáneo de Sotheby's, Alex Rotter.