Las tres formaciones de la oposición que aspiran a formar un tripartito en la Generalitat tras las próximas elecciones autonómicas articulan un frente federal en el que Cataluña se sitúa como el modelo a seguir. El riesgo de que la deriva soberanista se extienda a la Comunidad Valenciana del que advirtió el jefe del Consell, Alberto Fabra, esta misma semana en Madrid de sustenta en los postulados políticos que han venido defendiendo en los últimos años PSPV, Esquerra Unida y Compromís.

El líder del PSPV, Ximo Puig, es partidario de una reforma de la Constitución que permita avanzar hacia un modelo federal y arregle el conflicto de la financiación autonómica. EU, por su parte, aboga por una república en la que «un País Valenciano libre pueda estrechar lazos federativos con Cataluña, Baleares y Aragón». Compromís, por su parte, ha dado su respaldo explícito al «derecho a decidir» de los catalanes, lo que equivale a respaldar la consulta soberanista.

Ante este escenario, el PP considera prioritario que el PSPV, como segunda fuerza política de la Comunidad Valenciana, aclare definitivamente si está del lado de las tesis soberanistas. En este sentido, la secretaria general de los populares valencianos, Isabel Bonig, exige a los socialistas que «explique a los ciudadanos por qué su modelo para la Comunidad es el del independentismo». De acuerdo con Bonig, «los ciudadanos tienen derecho a saber que puede ocurrir si un tripartito gobierna» ante el modelo catalán que ya fracasó en Cataluña con el PSC y ERC al frente del Ejecutivo y que la oposición valenciana ha tomado como ejemplo.