Las posturas de yoga que favorecen el equilibrio hormonal

En primer lugar, Haegele habla sobre que el bienestar de la mujer de sostiene sobre cinco pilares: movimiento, descanso, digestión, desconexión y conexión. Y hay una técnica que ayuda a mejorar estos cuatro elementos en nuestra vida: el yoga. Si nos centramos en el movimiento, comenta la autora que cada persona se mueve de una manera, y no hay manera reglada de hacerlo. Por ello, en el libro la experta se centra en elegir y enseñar movimientos y posturas que ayudan a estirar y fortalecer músculos importantes para el equilibrio hormonal, como los abductores o el suelo pélvico. También, presenta rutinas de yoga para mejorar las digestiones.

Si hablamos de yoga para, por ejemplo, cuidar el útero y los ovarios, la profesora de yoga propone ocho posturas distintas: cuclillas dinámicas, empezamos en cuclillas con las manos agarrando los pies, para luego estirar las piernas, manteniendo las manos en los pies; círculos de cadera; perro bocabajo (es mejor mantener las piernas un poco flexionadas); la esfinge, la postura del niño, círculos supinos de rodillas, media mariposa con caderas elevadas y bebé feliz. También propone una meditación, que podemos encontrar en su canal de YouTube.

Para poder hacer una rutina de yoga que mejore nuestras digestiones, las posturas recomendadas por la Susanne Haegele son las siguientes: cierre abdominal, se pie o sentada, nos agachamos vigorosamente, mientras exhalamos para vaciar los pulmones; cuclillas, manteniendo los brazos por delante y con las palmas de las manos hacia arriba; a gatas, manteniendo la espalda baja plana; el tigre y la mesa en equilibrio; la postura del niño, con la frente en el suelo y los glúteos en los talones y torsión supina. También, lo acompaña de una meditación:

Lo propio con el cuidado del suelo pélvico. En este caso, en primer lugar la recomendación de la profesora es «sacudirnos un poco». Simplemente, movernos como si fuéramos un «perro mojado» y soltarnos un poco, al menos un minuto. Después, recomienda realizar la postura de puente activo, manteniendo las caderas altas y con un bloque entre las piernas. También, la postura tranquila de descanso con cierre abdominal, manteniendo las plantas de los piel en el suelo, las rodillas elevadas y la espalda completamente pegada al suelo. Asimismo, se puede realizar la postura de las rodillas al pecho. También cuenta con una meditación propia, que podemos ver en vídeo: