Rajoy firma un pacto con el PAR para asegurarse tres escaños más en el Congreso

El acuerdo sellado ayer supone una ampliación del pacto de gobernabilidad suscrito en esta región en julio, con el que Rudi —tras ganar las elecciones autonómicas, pero sin mayoría absoluta— logró el apoyo del PAR para su investidura. Aquel pacto fue avalado personalmente por Rajoy, y el acuerdo suscrito ayer refuerza la cooperación entre PP y PAR, retomada tras doce años en los que los aragonesistas fueron socios de gobierno del PSOE en Aragón.

El documento es conciso y detalla las condiciones de la coalición, con las que el PP garantiza al PAR tres «puestos de salida» en las listas al Senado y presencia simbólica en las del Congreso. En cuestiones programáticas, el documento incide en desbloquear proyectos como la Travesía Central del Pirineo, varias autovías o los embalses del Pacto del Agua. En política hídrica, el PAR ha impuesto el rechazo a un hipotético trasvase del Ebro.

Rajoy, Rudi y Biel subrayaron que la prioridad de la coalición es luchar contra la crisis y el desempleo. El líder del PP enmarcó esta alianza con el PAR en su empeño por conseguir un Gobierno de amplia base política y social. España —remarcó— «requiere que todos sumemos», por encima de «dimes y diretes» partidistas.

No es esta la primera alianza del PP con una fuerza nacionalista, ya que la semana pasada firmó otra con UPN. El objetivo de Rajoy es sumar diputados en las comunidades donde puede tener mayores dificultades, como consecuencia de la presencia de estos partidos regionalistas, que le pueden arrebatar escaños. En el caso de UPN hay también otra causa mayor, la necesidad de cerrar el paso a Bildu y obstaculizar su presencia en el Congreso de los Diputados con los votos navarros. Estos dos acuerdos le garantizan escaños en estos dos territorios.

A estas alianzas no se sumará otra con el Foro Asturias de Álvarez-Cascos, con el que el PP no tiene previsto realizar ningún acercamiento, aunque es consciente de que puede perder al menos dos escaños en esa comunidad autónoma. Sin embargo, las perspectivas electorales auguran un ascenso de votos en dos Comunidades donde el PP tiene un amplio recorrido: Cataluña y Andalucía. En el caso de esta última, los sondeos le dan hasta seis escaños en la provincia de Sevilla, frente a los cuatro que tiene en la actualidad, pudiendo igualar a seis con el PSOE, según han asegurado a ABC fuentes populares. En la capital andaluza ya hay candidato para sustituir a Soledad Becerril: será Cristóbal Montoro, responsable económico del PP.

Los cabezas de lista del PP podrían ser presentados en la Convención Nacional que los populares celebrarán este fin de semana en Málaga y cuyo contenido adelantó ayer el vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons. El dirigente popular arremetió contra el candidato socialista Alfredo Pérez Rubalcaba, instando al PSOE a que lo «mande al corral» porque es un «candidato derrotado».

González Pons advirtió de que el Partido Popular, si llega al Gobierno, teme encontrar en la Administración del Estado «agujeros que desconocíamos», como ha sucedido en las autonomías, y condicionó las promesas electorales a conocer la realidad del país, «porque las previsiones no son reales». Además, instó a Rubalcaba a desvelar si el presidente Zapatero ha recibido una carta del presidente del Banco Central Europeo indicándole los recortes que hay que hacer para que España no sea intervenida.