Baía do Sancho, así es la playa más bonita del mundo

La playa forma parte del Parque Nacional Marino de Fernando de Noronha (Brasil) reconocido por la Unesco como Patrimonio Mundial de la Humanidad. Además de ser un lugar donde se puede disfrutar de las playas y de la singular belleza natural, alberga un ecosistema delicado con especies que están en peligro de extinción, siendo considerado este archipiélago como un santuario para muchas especies. En el interior del Parque, además de Baía do Sancho existen otras playas como Playa de León en las que se puede pasear en barco, hacer inmersiones marinas y contemplar delfines desde el mirador de la Bahía de los Delfines.

En un entorno de naturaleza única, la playa, al estar dentro del Parque Nacional, está protegida y su acceso está limitado mediante el pago de una «Tasa de Preservación» -42 euros para extranjeros y y 21 para brasileños válida para diez días- y el tiempo de visita está tasado en dos horas lo que hace que la playa no esté masificada.

Una de las mejores épocas para conocer a Baía de Sancho es en el período lluvioso, generalmente de abril a junio cuando la playa reserva una sorpresa: dos cascadas se forman y fluyen como dos cortinas de agua.

Para llegar hasta la playa, es necesario bajar tres tramos de escaleras que se encuentran entre las hendiduras de las rocas. El acceso es algo difícil, pero el esfuerzo es recompensado por un increíble escenario de mar tranquilo y cristalino en donde se puede ver los corales y los peces. El lugar es ideal para el buceo y para la observación de tortugas, peces coloridos y rayas en sus aguas transparentes con una temperatura media de 26ºC.

Para visitar a Baía do Sanho, antes es necesario llegar a Fernando de Noronha, ubicado a 545 kilómetros de Recife, en el estado de Pernambuco. También se puede ir a Noronha en avión o en barco.