Las localizaciones italianas de 'La casa Gucci', incluida una villa que puede alquilarse

En este melodrama de lujo y moda destacan las interpretaciones de sus actores, un elenco formado por Lady Gaga, Adam Driver, Jared Leto, Al Pacino, Jeremy Irons y Salma Hayek , pero, más allá de esto, el filme también cautiva por la Italia retratada con gran belleza, con sus villas y palacios a la cabeza. Aunque la acción trascurre entre Nueva York, St. Moritz, Milán y el Lago di Como, la realidad es que los escenarios se han centrado en dos ciudades, Roma y Milán.

La capital italiana ha sido la base principal de esta producción. El equipo pasó 43 días rodando muchas de las escenas exteriores, así como las de algunas de las casas que se ven en el filme haciéndolas pasar por Milán. Así, se puede ver la tienda de Gucci de la Via Condotti , emplazamiento que acoge algunas de las escenas más míticas, como la salida de Sophia Loren o el encuentro entre Patrizia y Waldo.

Otra de las escenas más importantes es la boda entre Patrizia y Maurizio –a la que no acude ningún miembro de la familia Gucci–, escena que se rodó en la iglesia Santa Maria in Campitelli . Este edificio está situado en el barrio de Sant Angelo, en la Piazza Campitelli, y su aspecto actual data del siglo XVII, cuando el Papa Alejandro VII ordenó su reconstrucción al arquitecto Carlo Rainaldi. E l Trastevere , donde encontraron un antiguo almacén que convirtieron en la casa taller de Paolo Gucci, es otro de los emplazamientos.

Milán y el Lago di Como son otros de los lugares que brillan con luz propia en la película. De la primera se puede ver, en alguna de las citas de la pareja, el restaurante Savini, situado en la impresionante Galería Vittorio Emanuele II . Esta galería comercial, también conocida como El Salón de Milán, acoge las tiendas más prestigiosas y elegantes de la ciudad. El edificio, construido entre 1865 y 1877, está formado por dos arcadas perpendiculares cubiertas por una bóveda de vidrio y hierro y está ubicada entre el Duomo y el Teatro alla Scala . Su visita es uno de los imprescindibles de esta ciudad cuna de la moda.

Las villas, propiedad de la familia Gucci, son otros de los escenarios más lujosos y llamativos. La primera de ellas es Villa Necchi Campiglio , residencia de Rodolfo Gucci (interpretado por Jeremy Irons). Esta mansión, que data de 1935, está inmersa en un amplio jardín privado con piscina y cancha de tenis y está ubicada en el centro de Milán. En la actualidad es un museo y en ella se puede ver la distribución tradicional de las casas nobles, con las zonas comunes en la planta baja, entre las que destacan el comedor, la sala de fumadores, la biblioteca o el gran salón, los dormitorios en la primera planta y las habitaciones de servicio en el sótano. La entrada cuesta 14 euros y está abierta de miércoles a domingos de 10.00 a 18.00.

Pero, si hay una villa que llama la atención esa es, sin duda, la residencia de verano de Aldo Gucci, un impresionante edificio situado en un paisaje sinigual a orillas del Lago di Como. Villa Balbiano , nombre real de este emplazamiento, es un palacete del siglo XVI que perteneció al Cardenal Tolomeo Gallio y fue la residencia del Cardinal Angelo Maria Durini durante el siglo XVIII. Este espacio, que fue recientemente modernizado por el prestigioso interiorista francés Jacques Garcia , se alquila para bodas y fiestas, aunque con motivo del estreno de la película Airbnb la ha incluido en su oferta para que los fans del filme puedan pasar una noche en ella, más concretamente el 30 de marzo de 2022.

Será el día 6 de diciembre, a partir de las 00.00, cuando estén disponibles las reservas. Eso sí, no será nada barato ya que la noche está a 1.125 dólares, unos 1.000 euros al cambio . El precio incluye el acceso al embarcadero privado, la piscina y a sus exquisitos y extensos jardines, un espacio verde que ha ganado varios premios de la British Society of Garden . En el interior todo son lujos. Las habitaciones cuentan con camas barrocas de terciopelo, lámparas chandelier, bañeras de mármol, muebles de siglos pasados y obras de arte de gran valor colgadas de sus paredes, incluidos los frescos del siglo XVII pintados por los hermanos Recchi y Agostino Silva, que se conservan en perfectas condiciones.

Los fans de esta truculenta historia también podrán viajar a Londres para disfrutar de una estancia de lo más lujosa y exclusiva. Con motivo del 100 aniversario de la casa de moda italiana, la suite Royal del mítico hotel The Savoy se ha transformado en la Royal Suite by Gucci llevando a sus huéspedes a una experiencia innovadora que lleva los límites del lujo a una nueva dimensión. Las historias de este alojamiento y la firma están estrechamente unidas ya que Guccio Gucci , fundador de la compañía, trabajó como botones en este hotel. Su estancia aquí le llevó a desarrollar más su gusto por la moda y a decidir regresar a Florencia para establecer su propia tienda de cuero en 1921.

Esta habitación, con 265 metros cuadrados, ocupa el quinto piso del hotel y dispone de salón, una pequeña cocina, dormitorio con una majestuosa cama con dosel, un baño acabado en mármol y un vestidor. En su interior, los muebles y objetos decorativos son de la colección Gucci Décor. Además, incluye una gran variedad de antigüedades y obras de arte procedentes de la casa de subastas Christie’s , obras que se pueden comprar junto con algunas de las piezas Gucci. Otro de los puntos fuertes de esta suite son sus vistas al río Támesis, el London Eye y otros puntos importantes de la capital londinense . Y para completar esta experiencia, aquellos que aquí se alojen recibirán, a su llegada, una botella de champán y un regalo sorpresa de Gucci y podrán disfrutar de un pase VIP para ir de compras, en un Rolls-Royce, a una de las boutiques de la firma o, por el contrario, comprar desde la comodidad de la suite. El precio de dicha habitación va desde los 18.756 euros la noche.

Por último, otra de las ubicaciones italianas que representa la exclusiva estación suiza de St. Moritz , donde la pareja cuenta con una casa a la que huyen cuando las cosas se ponen complicadas con la policía, es Gressoney-Saint-Jean , ubicada en la región del Valle d’Aosta, en el Monte Rosa . Esta conocida localidad turística dispone de una estructura hotelera del más alto nivel, además de pistas de esquí que mantienen ese estilo antiguo que va tan bien con la época en la que está ambientada la película.