La desconocida 'Casa de la Alegría' que está a solo 30 minutos de Sevilla

Blas Infante se trasladó a esta casa en 1933, buscando un entorno más saludable para su hijo menor, Luis, quien sufría de bronconeumonía. Este cambio de aires resultó beneficioso para el pequeño y permitió que Infante se dedicara a sus proyectos personales y profesionales en un espacio que consideraba inspirador. La construcción de la casa, que tomó dos años, culminó en 1935 y se diseñó con un estilo mudéjar, una clara referencia al esplendor del legado andalusí, que tanto influenció los ideales de Infante en torno a una Andalucía con identidad política y cultural propia.

Uno de los elementos más destacados de la Casa de la Alegría es su biblioteca, que albergaba aproximadamente 1,800 volúmenes, así como revistas de colección y manuscritos valiosos. Esta biblioteca no solo era un espacio de lectura, sino que simbolizaba el compromiso de Infante con el conocimiento y la cultura andaluza. Sin embargo, la estancia de Infante en este hogar fue breve, ya que el estallido de la guerra civil en 1936 interrumpió su vida y su obra. El 2 de agosto de ese mismo año, Infante fue detenido y asesinado, dejando a su familia con el desafío de mantener la casa.

Después de la muerte de Blas Infante, su familia hizo grandes esfuerzos económicos para preservar la casa. Finalmente, en 2001, la Junta de Andalucía adquirió el inmueble, que fue declarado Bien de Interés Cultural en 2006. Con una rehabilitación integral llevada a cabo entre 2008 y 2010, la Casa de la Alegría reabrió sus puertas el 5 de julio de 2010, coincidiendo con el 125 aniversario del nacimiento de Infante, convirtiéndose en el Museo de la Autonomía Andaluza.

Hoy en día, la Casa de la Alegría forma parte de un complejo museístico que además del Museo de la Autonomía, incluye un centro de investigación dedicado a las ciencias sociales, enfocado en el estudio de la realidad andaluza. Este recinto se ha convertido en un referente para la difusión de la historia y cultura de Andalucía, ofreciendo a los visitantes una visión integral del camino hacia la autonomía.

La arquitectura de la Casa de la Alegría es un reflejo del estilo personal de Infante, que combina elementos de diversas épocas y tradiciones. Desde su exterior sobrio, caracterizado por muros de ladrillo y almenas escalonadas, hasta el interior ecléctico que incluye yeserías, azulejos y pinturas murales, cada rincón de la casa parece único. Las estancias más emblemáticas incluyen el comedor principal, decorado con murales orientalistas que rinden homenaje a la influencia musulmana en la historia andaluza, así como la biblioteca y el despacho de Infante, donde se pueden encontrar objetos que pertenecieron a figuras importantes de su vida.

Y es que la Casa de la Alegría no solo es un lugar de interés histórico, sino que también se ha convertido en un espacio para la educación y el disfrute cultural. La entrada al museo es gratuita, lo que facilita el acceso a todos aquellos que deseen conocer más sobre la historia de Andalucía y su lucha por la autonomía. Los visitantes pueden explorar las diferentes estancias de la casa, disfrutar de exposiciones temporales y participar en actividades que promueven la cultura andaluza.

Para aquellos interesados en planificar una visita, es recomendable consultar la disponibilidad a través del sitio web oficial del museo, donde se pueden realizar reservas y obtener más información sobre las actividades programadas.