Trinidad cardenalicia madrileña
Dentro de las diócesis que van a estar representadas, tanto en las congregaciones generales como en el cónclave, Madrid representa un caso único en toda la Iglesia
Omella, el hacedor de Papas
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Iniciar sesiónDentro de las diócesis que van a estar representadas, tanto en las congregaciones generales como en el cónclave, Madrid representa un caso único en toda la Iglesia. Situación que se puede calificar como una anomalía o como una singularidad histórica y que se explica ... por el interés y fijación que el Papa Francisco tenía con España. Los tres últimos arzobispos, que son cardenales, ya en Roma, estarán presentes en las congregaciones generales con perspectivas complementarias que podrían sintetizar muy bien los grupos de voto. Dos de ellos entrarán en el cónclave, aunque con sensibilidades diversas.
La trinidad (segunda acepción DRAE) cardenalicia madrileña está compuesta por el cardenal Antonio María Rouco Varela, por el cardenal Carlos Osoro Sierra y por el cardenal José Cobo Cano. El cardenal Rouco lleva a sus hermanos arzobispos matritenses dos cónclaves de ventaja. No entrará en éste pero, como ya se percibe en lo que llevamos de las congregaciones, los mayores de ochenta años están hiperactivos. Les avala su 'auctoritas'. Pongo un ejemplo. Si hay un cardenal con el que Rouco tuvo relación en la época en la que era todo en la Iglesia en España es el cardenal Giovani Battista Re, decano del colegio cardenalicio, cuyas homilías en el funeral y en la misa de inicio del cónclave habrá que leer con lupa. Durante veinte años trabajaron, codo con codo, en la congregación de obispos con los candidatos para España.
El cardenal Carlos Osoro entra en el cónclave por veinticinco días. Se podría decir que este regalo de la Providencia le ha hecho resucitar. Será su primer cónclave. No llega con las facultades de otros tiempos aunque no va a desperdiciar esta oportunidad que le ha brindado la Providencia. El Papa Francisco, de quien se dijo que era su hombre en España, le aceptó la renuncia a Madrid antes de lo que él preveía, a los 78 años, cuando esperaba llegar a los ochenta y pilotar su sucesión.
El cardenal José Cobo, éste sí, es el hombre de Francisco en España. Llega al cónclave habiendo sido nombrado por el Papa arzobispo de Madrid el 12 de junio de 2023 y cardenal el 30 de septiembre de ese mismo año. Para que no hubiera ni la más mínima duda de su unción, le añadió los nombramientos de los más importantes Dicasterios. Formaba parte del círculo inmediato del Papa, lo que se denomina la curia de Santa Marta en el exterior. No es el candidato continuista al pontificado por su edad, joven para el conjunto de la media, y por la necesidad de acreditarse ante el colegio cardenalicio. Pero será clave en la apuesta por un Francisco II.
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