El catalán será por ley «la lengua vertebradora» de la enseñanza en Baleares

March ha explicado que durante el periodo de exposición pública fueron presentadas 946 alegaciones al borrador inicial . Además, ha añadido que el texto originario fue debatido con Unidas Podemos y MÉS per Mallorca, que forman parte, junto con el PSOE, del Ejecutivo que preside la socialista Francina Armengol . Precisamente, los ecosoberanistas isleños consiguieron que March aceptase introducir un nuevo artículo referido al modelo lingüístico, el 133.1, que recoge explícitamente que al menos el 50% de las asignaturas se tendrían que impartir en catalán en los colegios e institutos, con el objetivo de «asegurar el proceso de normalización lingüística» .

Durante la presentación del anteproyecto final, el consejero de Educación ha destacado que la futura ley ha tomado como marcos esenciales de referencia dos iniciativas autonómicas aprobadas en su momento por sendos ejecutivos presididos por el PP. En concreto, se trata de la Ley de Normalización Lingüística, que se aprobó en 1986, y del Decreto de Mínimos, que vio la luz en 1997. Dicho decreto ya fijaba que la lengua vehicular en la enseñanza sería el catalán y también preveía ya que la mitad de las asignaturas deberían impartirse en ese idioma.

Una vez presentada ahora la versión final del anteproyecto de la futura Ley de Educación, los siguientes pasos serán su valoración por parte del Consejo Escolar, el Consejo Económico y Social, y el Instituto Balear de la Mujer. Con posterioridad, llegará la aprobación del proyecto de ley por parte del Govern, previsiblemente en marzo del próximo año, antes de que se inicie su preceptiva tramitación parlamentaria. En ese contexto, March confía en que la ley pueda ser finalmente aprobada a finales del próximo año .

«Esta ley pretende el máximo consenso educativo, social y político», ha destacado el consejero de Educación, al mismo tiempo que ha recalcado que el actual anteproyecto «es un punto de partida», una propuesta «abierta, no cerrada». En esa misma línea, March ha expresado su deseo de poder encontrar puntos de encuentro con el PP, que ha sido «un partido de gobierno» en Baleares en varias legislaturas. Preguntado sobre el motivo por el que finalmente ha desaparecido la referencia explícita al castellano como lengua vehicular, March ha indicado que la futura ley educativa balear quiere estar en consonancia con lo fijado ya en materia lingüística por la Lomloe o « ley Celaá ».

En cualquier caso, todo apunta por ahora a que tanto el PP como Cs y Vox votarán en contra de la nueva ley cuando llegue a la Cámara regional, entre otras razones porque consideran que supone una discriminación del castellano y porque denuncian que no ha sido consensuada ni con la oposición ni con las entidades del sector de la educación en Baleares. Por su parte, el partido nacionalista de centro Proposta per les Illes (PI) podría votar a favor del texto, ya que en materia lingüística coincide en lo esencial con los postulados que defiende el Ejecutivo de Armengol.