Alfonso Luque: «En algún entorno pensaron que hacía apología del nazismo»
El escritor sevillano ultima el cierre de su trilogía Hitler y Sevilla

Que Sevilla haya sido y sea inspiración y escenario de obras de todos los tiempos, que Sevilla sea la ciudad del arte y del duende, la ciudad del azahar y de las calles zigzagueantes, que Sevilla sea la del cielo azul de Murillo que se ... transforma en palio en aquellos días que reparte corazones entre las dos orillas, que a Sevilla le canten, que a Sevilla le dediquen versos, que Sevilla sea la de la tierra más fértil para la semilla cristiana, que sea la de Carmen de Mérimée o la de los tres puntos suspensivos de Machado... Eso no es novedad.
Pero, lo de convertir a Sevilla en centro neurálgico del Santo Grial, de la Sábana Santa o de la Lanza de Longinos, lo de convertir a Sevilla y sus hermandades en los lugares de peregrinaje de Hitler y su Ahnenerbe para saciar aquí su incansable sed de conquista de las reliquias cristianas, lo de hacer de la ciudad mariana y su mundo cofrade un auténtico escenario de Spielberg haciéndola sede de los delirantes objetos de poder que obsesionaron al Führer… eso sólo lo ha conseguido la mano del escritor Alfonso Luque, (Sevilla, 1974), en su trilogía Hitler y Sevilla.
Las conexiones insólitas que protagonizan las novelas del autor, el III Reich, el barrio de Triana y Gunilla Von Bismark, o María Magdalena con el mismo Führer o incluso un Indiana Jones español de Burgos, la genialidad con la que conjuga ficción y realidad y la ardua labor de documentación histórica que aflora en cada descripción que hace, catapultaron su primera novela al top 1 en 2021. Tras publicar 'La mano que soñaba con pájaros azules' en 2021 e 'Immacolato' en 2023, - (ambas de Punto Rojo Libros), nos habla del cierre de la trilogía que está preparando.
-Escribe su primera novela durante el Covid y sin ninguna pretensión más allá que la de divertirse en el confinamiento y se convierte en número 1 en ventas de la Librería Verbo (calle Sierpes), ¿a qué achaca el motivo de su éxito?
-Éxito es una palabra demasiado grande, al menos en el concepto tradicional en el que suele usarse. Hay un éxito comercial de reconocimiento público, yo me quedo con el éxito en pequeñas dosis, como las gotas de agua incesantes que desprende un grifo deteriorado, esto es la felicitación de los lectores. Luego hay otro tipo de reconocimiento aún menos grandilocuente, íntimo, el personal, quizás el más importante, donde me siento satisfecho por haber recorrido todo ese camino en el proceso de creación, con sus días grises y soleados, sin importar demasiado la meta.
-Se aventura con una temática, la de la persecución obsesiva de los nazis de los objetos de poder para dominar el mundo. ¿Qué le lleva a estudiar y escribir sobre estas reliquias sagradas y el nazismo? Y, siendo esta una temática tan especializada, ¿cómo se siente siendo enfermero de emergencias del CES 061, es decir, profesional de un área que nada tiene que ver con esto?
-Mi inquietud por estos asuntos comienza en la década de los ochenta, tras ver la película 'En busca del arca perdida', que me invitó a profundizar y saber más, me pareció muy sugerente la idea de que existieran objetos de poder en el mundo terrenal. Quizás no es tan relevante el tipo de formación académica en el terreno de las letras, sin restarle la importancia que tiene esta cuestión, sino la motivación y el entusiasmo que te suscita una temática determinada, lo cual provoca que se invierta tiempo y esfuerzo en ella, dedicación, en una palabra.
-Se ha hablado de puntos en España que pudieron albergar el Arca de la Alianza o el Santo Grial como Montserrat en Barcelona, la comunidad judía en Toledo, el museo arqueológico de Madrid, Jaén... se habló del Cáliz de Doña Urraca en León o incluso ubicó el mismo Papa Francisco el Santo Grial en Valencia… pero y ¿Sevilla? ¿Conoce alguna leyenda – o realidad- que vincule a Sevilla con algunos de los objetos sagrados que persiguieron los nazis?
-En la verdad de la mentira está la clave. No es tan importante perseguir si tal hecho o circunstancia es cierto o no sino el entusiasmo que te provoca pensar que pudo ser y ocurrir. Evidentemente conozco leyendas asociadas a la ciudad en este contexto. La ficción puede perder interés para algunos lectores si es pura y no está acompañada de hechos y personajes reales, históricos y contrastados, este es el epicentro de mis novelas, el trabajo documental, que absorbe la mayor parte del tiempo empleado, una labor necesaria y grata que confieso a veces se torna en algo agotadora en la espera de la inspiración, que suele llegar en la negrura de la noche y que culmina con sus pequeñas gotas ese amplio trabajo.
-El Puerto de Sevilla canalizó el comercio con América y se dice que los templarios llevaron el Santo Grial a América, ¿pudo por ello haber alguna conexión entre Sevilla y esta reliquia tan codiciada por el poder?
-A usted le voy a decir dónde está (se ríe)… que hubiera respondido el gran Antonio Gala. La verdad absoluta no la tiene nadie, solo hay teorías, escritos, pistas, unas más fundamentadas que otras, y no menos importante el legado cultural de historias transmitidas por vía oral de generación en generación. Yo no tengo tan claro que el Santo Grial fuera el objeto conocido que gran parte de la humanidad cree que es, y estoy muy a favor de que Sevilla se cruzara en su camino, fuera lo que fuera.
-¿Qué hay de Indiana Jones en sus novelas?
- Bastante. Sobre todo en 'La mano que soñaba con pájaros azules', desligar de la obra el equivalente nacional de este personaje de película es imposible. Le digo más, en el proceso de creación imaginaba a Aníbal realizando algunos gestos y actitudes propios de Indi.
-¿Qué relación hubo entre Hitler y Sevilla?
-La presencia nazi en territorio español y concretamente en Andalucía es más que notoria. Hay decenas, cientos de hechos contrastados, intereses de todo tipo, geopolíticos estratégicos o militares por la ubicación geográfica de la región, económicos y comerciales, culturales, esotéricos… También historias que atestiguan actividades confidenciales fuera de la oficialidad, en estas últimas sitúo a Hitler en la ciudad.
-El nazismo y los objetos de poder es un tema que atrae muchísimo, ¿por qué cree usted que gusta tanto este tema?
-Los nazis siempre estuvieron envueltos en un halo de misterio, en cuanto al interés archiconocido que tenían por los asuntos paranormales, llegando a crear una sociedad paracientífica formada por expertos de múltiples disciplinas que investigaban sobre esta materia. Hitler era un obseso de los objetos de poder, llegó a pensar que si los poseía dominaría el mundo. Esta mezcla de esoterismo y ciencia, política, ansias de poder y conocimiento, intriga, misterio, traición, violencia… hacen que el tema resulte fascinante para mucho público.
-Su segunda novela se centra en el personaje de María Magdalena, ¿aflora en la novela un personaje distinto del personaje histórico que se conoce?
-Hay múltiples versiones sobre ella, su vida y su razón de ser, alguna de rigurosa actualidad en los últimos años, que habla de una relación íntima y especial con el rabí de Galilea. Contemplando las diferentes teorías existentes, desde una posición aséptica, en la que predomina el análisis objetivo desprendido de la implicación religiosa y por qué no decirlo emocional, el enfoque que le aporto a esta figura, basado en dichas revisiones bibliográficas, es distinto al vertido por los expertos, otorgándole una función muy específica, la primera guardiana de las santas reliquias, piedra angular de un cometido que perduró siglos y siglos desde el I hasta la edad contemporánea.
-Vemos ritmo y aventura en su primera novela, con un Indiana Jones castellano que se sumerge en el mundo cofrade sevillano y a María Magdalena en su segunda novela con una recreación más profunda y un estudio más detallado de personajes y lugares, ¿en qué proceso de creación disfrutó más? Y ¿qué va a transmitir con su tercera novela y a quién se verá de protagonista?
-Eso es como plantear a un padre o una madre a qué hijo quiere más, pero lo intentaré. La primera entrega, 'La mano que soñaba con pájaros azules', destaca por lo trepidante de su ritmo en ocasiones. No exenta de contenido cultural resulta una lectura fresca, amena y entretenida que engancha al lector a querer saber más y continuar. Esta obra tiene de especial para mí ser la primera, como el primer amor, el primer beso… La segunda novela 'Immacolato' está aún más trabajada en lo documental e investigación, su lectura se debe desarrollar de manera más pausada, precisa para entender el relato. El uso de capítulos cortos origina que las acciones sean directas y rápidas, es algo buscado por mí en la estructura para fomentar ese dinamismo. Immacolato me colmó en cuanto al esfuerzo dedicado que tiene además un resultado final satisfactorio. La novela en la que ando inmerso y que cierra la trilogía será bastante diferente a sus hermanas mayores, presentará el descaro de la juventud, una narrativa con tintes distintos a lo ya publicado y tocará otros temas que se integrarán en una estructura muy singular, sin que por supuesto deje de existir el nexo en común que vincula a toda esta temática, como los grandes saltos en el tiempo y la presencia de personajes dispares. Hay varios protagonistas, uno de ellos, que quizás sea el que más llame la atención, será un excelente y peculiar entrevistador andaluz desaparecido hace pocas fechas y que siempre permanecerá vivo en nuestro recuerdo.

-Hitler y Sevilla en su primera novela y Hitler, María Magdalena y Sevilla en su segunda novela, ¿tiene dos o tres palabras para definir su tercera novela?
-Más que la definan, que la caractericen: Peculiar, original y humorística.
-Culmina y centra la obra 'La mano que soñaba con pájaros azules' en Sevilla pero recorre Londres, Roma, Praga o Edimburgo y confiesa usted en el prefacio que «no he estado en ninguno de los lugares que aparecen», ¿no cree necesario estar en el «lugar de los hechos»? ¿cómo consigue describir calles, tiendas o paisajes de manera tan exacta sin verlos?
-Respecto a lo que pregunta con mucho acierto en lo interesante de la cuestión, rotundamente no es necesario conocer en persona lugares o personajes para poder describirlos, es más, me parece mucho más motivante imaginar cómo es algo o alguien sin haberlo visto, sin duda las descripciones en las que los sentidos han estado presentes son muy diferentes de las otras, la objetividad predomina, en cualquier caso, ambas son válidas, tienen su razón de ser y ninguna es desestimable.
- De todos los personajes que aparecen en su obra, Jesucristo, María Magdalena, Hitler, Himmler, Otto Rhan, Franco, escritores del 27, escultores como Juan de Mesa, Gunilla Von Bismark, etc. ¿cuál le ha divertido y apasionado más estudiar para poder escribir de él?
-Silvio Fernández Melgarejo.
-Los poderes que irradian las reliquias cristianas son, casi, el sentido de su trilogía, ¿cree usted en estos objetos de poder? ¿qué hay para usted de verdad en todo esto?
-Creo en la necesidad de que existan, de que formen parte de la tradición ancestral y de nuestra cultura. No es tan importante si efectivamente tienen poderes sobrenaturales como el romanticismo que implica pensar que así es, la fe en ellos.
-El libro tiene una importante carga histórica y documental, ¿sobre qué tuvo más dificultades para encontrar datos? Y habiendo tanto trabajo de investigación, ¿cuenta todo lo que descubrió?¿le cuesta no contar todo lo investigado?
-El trabajo documental es variado en cuanto a sus fuentes. Hoy en día se emplea con frecuencia todo lo que ofrece internet, una puerta abierta al mundo donde se encuentran cosas interesantes. También tiene presencia el trabajo a pie de campo, visitas a museos, bibliotecas, archivos históricos, exposiciones, en esto me pareció muy gratificante la visita que realicé al palacio de Hofburg, en Viena, el tesoro de los Habsburgo, el lugar donde Hitler vio por primera vez la lanza del Destino y se obsesionó con ella. La investigación más difícil siempre suele venir determinada por la época de la historia, la edad media fue una época oscura y poco documentada, me resultó difícil averiguar cómo vivía la gente, qué comían, cómo eran sus casas, sus costumbres y ropajes según el estatus social, sus fórmulas de tratamiento según el siglo en cuestión, ajustar el calendario actual al del siglo XIV y un largo etc de complicaciones que se subsanan con dedicación. Un mago que se precie de serlo nunca desvela sus trucos.
-¿Por qué divide la primera obra en las 14 estaciones del vía crucis y no en capítulos?
-Si soy sincero no fue buscado de inicio, tenía clara la base de la estructura de la obra, pero no los detalles, y surgieron catorce capítulos que finalmente me pareció bien titularlos con cada una de las estaciones que forman el via crucis.
-Sus portadas, símbolos nazis, el Giraldillo y siempre pájaros azules. ¿Qué le inspira a crearlas?, ¿qué significan y qué quiere transmitir?, ¿le han trasladado algún comentario anecdótico sobre las mismas?
-El objetivo de una cubierta exterior es llamar la atención al posible lector, crearle interés en profundizar sobre aquello que ve y aventurarse a leer el contenido de la tripa. Las dos portadas son diseños míos que un excelente departamento de la editorial Punto Rojo Libros le da forma y las convierte en realidad. Juego con el contenido de las obras, intentando concentrar en una imagen significativa, como el Giraldillo con el escudo nazi o una Inmaculada Concepción guerrera portando una espada templaria ensangrentada, lo que simbolizan las letras que forman las tramas. He tenido varias anécdotas al respecto, dado lo impactantes y transgresoras que pueden resultar, en algún entorno pensaron que hacía apología del nazismo, sencillamente no se molestaron en leer el texto, de lo contrario no hubieran pensado eso ni por asomo.

-Es usted responsable sanitario de la Primitiva Hermandad de los Nazarenos de Sevilla, y es el Silencio una de las Hermandades protagonistas en su primera novela, ¿qué le ha parecido a los hermanos de esta cofradía?
-A nivel institucional, como opinión de la hermandad, no tengo referente. Hace muchos años que pertenezco a la hermandad madre y maestra, eso conlleva que hermanos de la corporación hayan leído las obras y asistido a los actos de presentación de las mismas, la opinión que me han trasladado es positiva, satisfactoria, las han disfrutado.
-Sevilla, el Silencio, el cristianismo... y hasta la Antilla, el fútbol y los bares de los Remedios... ¿escribe sobre sus pasiones?
-Se podría decir que sí, me resulta divertido escribir sobre aquellas cosas que forman parte de mi vida, en mayor o menor dimensión. Hay un equipo de fútbol, cuyo nombre no se menciona en ningún lugar de ambos libros, pero que está presente en diversas tramas.
-¿Entiende o disfruta mejor sus libros un sevillano que alguien que no lo sea?
-Los pueden leer y disfrutar personas de cualquier región, porque lo narrado trasciende más allá del ámbito local, pero es probable que el sevillano aún más, básicamente porque aquel que conoce la ciudad, sus calles, olores, negocios, edificios, etc., puede recrear la imaginación de las tramas asociándolas a cosas que conoce y le resultan familiares a sus sentidos, y eso potencia.
-Ha dicho usted que «no es ningún fracaso que el relato se quede archivado en mi ordenador», ¿no escribe para compartirlo? ¿qué pretende al escribir? ¿tiene intención de participar en premios de novelas a nivel local, en Andalucía o en España?
-No es ningún fracaso en absoluto. De hecho, mi intención primaria era conservarlo para mí. Luego se suceden los acontecimientos y termina en publicaciones por el azar del destino. Contento en cualquiera de los casos. ¿Qué pretendo al escribir? Poder ser yo mismo, procurándome un pequeño oasis de libertad que no tenemos casi nunca oportunidad de tener en una vida repleta de obligaciones, crear un espacio de paz donde reine el entusiasmo, el intimismo, permanecer todo el tiempo posible en el paraíso que nadie en su sano juicio quisiera abandonar. No es algo que me haya planteado presentarme a certámenes o premios, aunque estoy abierto a todo y cerrado a nada.
-El hilo argumental de sus novelas podría sin duda encauzar una película, dando el salto al formato televisivo, ¿ha pensado en esta posibilidad y qué aceptación cree que tendrían?
-Sí que lo he pensado, porque estoy convencido de que estas novelas se pueden adaptar perfectamente a eso que comenta. Contienen los ingredientes necesarios, en cuanto a estructura, personajes y tramas, que pueden resultar interesantes para el público televisivo, en cualquiera de sus formatos, cine, series en plataformas de televisión… pero obviamente no depende de mí.
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