Enrique Tomás: «Ahora vendemos más bocadillos de jamón con un café que con una cerveza»

- Se define como un friki del jamón.

-Sí, soy un friki del jamón. En Cádiz, especialmente, en Barbate y Zahara, hay muchos friquis del atún y ellos saben que el atún no es una lata, igual que los frikis del jamón sabemos que el jamón no es un sobre. Es un mundo.

- ¿Venden muchos bocadillos de jamón?

-Muchísimos. Y curiosamente ahora vendemos más bocadillos de jamón con café que con cerveza o vino. Están cambiando los costumbres y el jamón lo admite todo. Esto de tomar jamón con café era algo impensable hace veinte años. Por eso, yo sigo intentando transmitir que el mejor maridaje posible es con vino fino de Jerez, a ser posible Harveys, que para mí es el mejor del mundo.

-¿Qué hace Sevilla tan especial para un empresario del jamón?

-Sevilla es al mundo del jamón como la plaza de la Maestranza al mundo de los toros. Nosotros hemos cogido siete locales en el aeropuerto de Sevilla, cuatro ya están abiertos y tres a punto de abrirse. Si Dios quiere, todos ellos facturarán unos 20 millones de euros al año. Yo llevo años y años comprándole a grandes fabricantes de Sevilla como Romero Álvarez y a Sierra de Sevilla, que antes era de Barbadillo. Pero aparte de todo eso, en Sevilla el jamón sienta mejor por muchos motivos: coge la temperatura rápido y los sevillanos tienen la cultura del jamón a flor de piel. Sevilla es el sitio y es vital para cualquier empresario que quiera hacer algo serio en el tema del jamón. Somos una compañía mundial con sedes en varios países pero en este momento Sevilla es estratégica para nosotros y la tercera ciudad más importante de nuestra compañía en ventas después de Barcelona y Madrid.