Emasesa proyecta una subida de las tarifas de agua en Sevilla

Preguntado ante la subida de las tarifas en la capital de la Costa del Sol, el regidor hispalense planteó esta cuestión que analiza la empresa municipal de aguas con unos embalses en mínimos históricos y con unas lluvias como las que se produjeron en la madrugada de ayer viernes que no son suficientes para recuperar los niveles deseados para garantizar un abastecimiento de agua a los sevillanos más allá de un año.

Este anuncio llega cuando los embalses de Emasesa que abastecen a la capital y su área metropolitana se sitúan en su mínimo histórico en las últimas tres décadas, al 31,7 por ciento de su capacidad, con un volumen embalsado actual de 203,79 hectómetros cúbicos.

Emasa, la empresa malagueña de aguas, anunció hace unos días que actualizará las tarifas por primera vez en ocho años y creará un canon hasta 2043 para hacer frente a los costes energéticos disparados y a la acuciante situación de sequía. La previsión es que la subida se traduzca en los recibos de los malagueños a partir del segundo trimestre de 2024.

Asimismo, esta medida se une a la que ya se está implantando en las casas sevillanas porque la empresa municipal lleva instalando desde el año pasado nuevos contadores inteligentes de agua.

Es un sistema de tele-lectura que contribuirá a cada cliente conocer a través de una aplicación móvil aquellos datos que permitan mejorar tanto la eficiencia hídrica como la predicción de la demanda y al ahorro, proporcionando nuevos servicios a los usuarios como la detección fugas indeseables en las viviendas, consumos anómalos o servicios a personas vulnerables.

Esta digitalización de los contadores conlleva un doble objetivo. Para Emasesa es una pieza clave en el proceso de transformación digital puesto que «permitirá una mayor eficiencia en la gestión de la empresa y de un recurso tan escaso y valioso como es el agua», tal y como señaló a ABC de Sevilla en su momento Jaime Palop, su consejero delegado. Luego, otra razón que explicó es que se trata de conocer «cómo consumen el agua nuestros usuarios, permitiendo realizar una mejor planificación de los procesos de control, lo que redunda en eficiencia hídrica».

Y para el usuario estos contadores inteligentes supondrá un cambio a la hora de entender el uso del agua, puesto que «le permitirá conocer con detalle cómo usa el agua y podrá tomar decisiones para lograr eficiencia en su uso».

Con la instalación de estos contadores, se obtendrá una información que permitirá proporcionar servicios personalizados a los distintos colectivos de usuarios como lo son las personas mayores, las personas en riesgo de exclusión, personas en situación de fragilidad, etc.

Con esto, será posible verificar si se está haciendo un consumo responsable o no, y «si nos acercamos o desviamos de alcanzar el Objetivo 90, consistente en bajar el consumo de los actuales 112,5 litros por habitante y día a 90, importante en un momento como el actual en que tenemos declarado el estado de prealerta por sequía en Sevilla y el área metropolitana».

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Paralelamente a este proyecto, Emasesa y la Universidad Pablo de Olavide firmaron un protocolo en el que se tenían monitorizadas a 200 familias «que proporcionan información muy útil para nosotros en cuanto al consumo. Además, «según las estadísticas, podemos enviarles mensajes para que sean más eficientes en sus hogares», detalló el consejero delegado de la empresa municipal del agua.