En 'Ser o no ser', la nueva serie juvenil de RTVE, la transexualidad no es un drama

«Yo no soy Joel. Su historia no es la mía personal, pero sé cuales son sus vivencias y puedo reflejarme», cuenta en videollamada con ABC desde su piso compartido en Madrid. Alguna escena se le hizo más difícil, como aquella en la que su personaje, en pleno botellón en un parque, tiene que orinar: «Hay cosas, quieras o no, que te tocan en lo personal». Pero el conflicto del adolescente protagonista de 'Ser o no ser' no es su proceso de transición. «Que seas trans no significa que a veces no seas un 'culo' con las cosas. Tampoco somos santos», admite el intérprete, también protagonista de la sexta temporada de 'Élite'.

La creadora y guionista de 'Ser o no ser ', Coral Cruz (' Uno para todos '), no quería mostrar, por ejemplo, a una madre sufridora que lucha para que su hijo pueda hormonarse. «Está dirigida para adolescentes, pero es muy transversal porque habla de los grandes valores de la vida: la amistad, la mentira, el primer amor, que es tan maravilloso», presenta. Su objetivo, junto a la directora Marta Pahissa ('Las del hockey'), era dar naturalidad y veracidad al asunto, aunque también quitarle hierro. Todo el equipo fue asesorado por los activistas trans Damián Díaz y Miquel Missé. «Marta y Coral querían hacer una serie que no fuera oscura. No es un drama ser trans o ser gay. No es ningún drama. La serie es esperanzadora», añade Ander Puig.

«Contrasta con lo que están consumiendo en general los jóvenes hoy en día: series muy poco realistas en las que los adolescentes se matan entre ellos. Me parece muy descorazonador que todos los adolescentes estén pensando solo en drogarse y en tener sexo», sostiene Cruz. La guionista quería hablar de la adolescencia que «respira» con su hijo –ahora alumno del Bachillerato escénico– y mostrar a chavales que sienten pasión por algo –la interpretación– y quieren superarse a sí mismos. Así sucede en series anglosajonas como 'Glee', 'Rise' y 'Sex Education' .

En ' Ser o no ser' , los adolescentes no practican un sexo propio de veinteañeros. Sí se dan su primer beso. En el 'casting' intentaron que los intérpretes tuvieran una edad lo más cercana posible a sus personajes. Después contaron con un 'coach' de actores jóvenes para trabajar su gestualidad y que los mayores parecieran menores. Maquillaje, peluquería y vestuario hicieron el resto: parecen estudiantes de 1º Bachillerato.

Tampoco querían que la serie fuera dogmática o aleccionadora. «Por eso, el conflicto central no tiene nada que ver con toda la parafernalia burocrática y médica de la transición. Partimos de una realidad que damos por hecho de que la inmensa mayoría de la gente conoce», explica la creadora de 'Ser o no ser '. En una escena, por ejemplo, la madre le pincha testosterona a su hijo. «Hay un montón de elementos que son casi documentales, pero no están explicados, sino incrustados dentro de la historia dramática», avanza Cruz. Ella cree que la audiencia, desde la emoción, comprenderá a madre e hijo, muy unidos, pero también a una abuela que no entiende que su nieta es nieto.

El personaje de la madre, al que interpreta Anna Alarcón, era y es clave; en principio iba a tener mayor protagonismo (la serie iba a ser más dramedia ). La inspiración para la guionista, aunque fuera una serie de encargo, fue una amiga cuyo hijo le había contado que era trans. Para Coral Cruz, era muy importante que el personaje de la madre apoyara a su hijo en su transición, aunque con contradicciones: «Mi amiga tenía miedo por las hormonas y las futuras operaciones… Hay una parte que tiene que ver con la salud y cómo el cuerpo va a recibir eso. Tampoco hay un blanco o un negro».

La identidad es la columna vertebral de la ficción producida por Big Bang Media ( 'Perdida' ) y The Mediapro Studio ( 'La edad de la ira' ). «Es una serie que va más allá del tema trans y que habla sobre lo complicado que es la creación de la identidad de uno mismo en esta sociedad en la que podemos ser tantas cosas, en la que nuestra identidad ya no viene tan predeterminada como en generaciones anteriores», explica Cruz. Eso se traslada a todos los personajes de la serie, incluso a la profesora de interpretación (Emma Vilarasau).