Detenidos dos hermanos iraníes que preparaban un atentado con cianuro y ricina en Alemania

Los dos detenidos son Monir J., refugiado de 32 años, y su hermano menor J. J., de 25. El fiscal Holger Heming ha informado que «se les acusa de ponerse de acuerdo para cometer un atentado de inspiración islamista, para el que habían adquirido ya sustancias tóxicas como cianuro y ricina, y con el que pretendían asesinar a un número indeterminado de personas». La ricina es un agente tóxico clasificado por el Instituto Robert Koch como «arma química».

Las fuerzas de seguridad alemanas recibieron una alerta sobre el plan terrorista por parte del FBI estadounidense, según ha publicado el semanario 'Der Spiegel'. Aparentemente, agentes estadounidenses se habían infiltrado en el grupo de chat de Telegram en el que los dos presuntos perpetradores habían solicitado información sobre la fabricación de bombas y sobre toxinas.

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Inicialmente, según esta misma fuente, hubo indicios de que atacarían en la víspera de Año Nuevo. Sin embargo, a causa de la carencia de uno de los componentes necesarios, habían pospuesto la fecha. También se ha filtrado que uno de los dos hermanos es ya conocido por la Policía y que actualmente está en tratamiento psiquiátrico. De los chats de Telegram se puede deducir que que es un presunto simpatizante de Estado islámico. Un vecino lo describe como un joven tranquilo y discreto, que entró en Alemania en 2015 y pidió asilo. Durante el procedimiento burocrático, fingió ser un cristiano perseguido en Irán. Las autoridades alemanas creyeron su historia y le habían concedido un permiso de residencia que se ha ido renovando y que es válido hasta finales de julio.

El hermano menor había sido anteriormente condenado por intento de asesinato a siete años de prisión en 2019. Fue juzgado por haber arrojado una gran rama desde un puente a la autopista 45, una noche de julio de 2018. La rama golpeó un automóvil y el conductor de 32 años resultó herido por astillas de vidrio. El perpetrador estaba borracho en este momento y el tribunal que lo juzgó ordenó su ingreso en un centro de desintoxicación durante un año. A última hora de ayer, en el momento de su detención, todavía estaba alojado en el centro de rehabilitación en Hagen, pero se le había permitido quedarse con miembros de la familia durante el fin de semana.

La detención la llevaron a cabo anoche fuerzas especiales SWK, que sin embargo no hallaron explosivos en los registros de las viviendas. Solamente los posteriores interrogatorios a los vecinos llevaron al garaje del que los detenidos no eran oficialmente inquilinos, pero sí tenían acceso.

La Fiscalía General Federal responsable de las investigaciones por terrorismo, no se ha hecho todavía cargo del caso. «Estamos en contacto con las autoridades competentes de Düsseldorf y de Renania del Norte- Westfalia, observando todavía los acontecimientos», ha declarado una portavoz.

El ministro regional de Interior Herbert Reul ha confirmado que el Gobierno estuvo al tanto de las «pistas que debían tomarse en serio» y que concluyeron con las detenciones. La ministra federal de Interior, Nancy Faeser, había respaldado también la incursión de los agentes en el domicilio de los detenidos.