Cristina Fernández de Kirchner

Jorge Fernández Díaz

Secuelas del Watergate argentino

Milei se salvó por un pelo y mantiene su cabellera intacta, que tiene ahora por guardaespaldas al amo del mundo

Rosa Belmonte

Bailando con lobas

Claro que el fascismo no es hoy ni parecido al clásico de los años 30; se puede ser fascista y de izquierdas