«Campeón en diversidad» y adicto al fitness: así es Bernard Looney, el ex-CEO de BP que ha dimitido por no informar de «sus relaciones» con compañeros

La primera vez que BP fue alertada sobre estos encuentros fue en mayo de 2022. Estas informaciones provenían de una fuente anónima. Tras recibirlas, se inició una investigación en la que el ya ex-CEO de la empresa admitió una «pequeña cantidad de relaciones históricas con colegas antes de llegar a su puesto de consejero delegado».

Looney proviene de una familia humilde. Según cuenta él mismo en su perfil de LinkedIn, se crió en una granja en la ciudad de Kenmare. En ella, informa The Daily Mail, había tierras cultivables y algo más de diez vacas. Este medio británico cita testimonios que afirman que se pensaba que en el futuro se quedaría al frente de ese pequeño negocio, pero que finalmente no fue así, al convencerle su madre de que fuese a la universidad.

Sus padres estudiaron en el colegio hasta los 11 años, por lo que Looney, graduado en Ingeniería Eléctrica en Dublín y con un máster en la Universidad de Standford se convirtió en el primer miembro de su familia con estudios superiores. Por su parte, sus hermanos trabajan como electricista uno de ellos y como oficial de policía, el otro, informa The Daily Mail.

Con 21 años y tras terminar su carrera, Bernard Looney se incorporó a la plantilla de BP. Corría el año 1991, y comenzó así su andadura en la empresa en el Mar del Norte. Posteriormente estuvo en México o Vietnam. «He sido afortunado por haber podido disfrutar de experiencias increíbles mientras trabajaba aquí», narró en su cuenta profesional.

Looney llegó al mando de la compañía en 2020, tras tres décadas trabajando allí. Entre sus primeras ambiciones estaba rebajar las emisiones de carbono; también tareas relacionadas con las renovables. «Establecimos un nuevo rumbo para la empresa y nuestro nuevo propósito era reinventar la energía para las personas y nuestro planeta», contó en su LinkedIn.

En su tarea al frente de BP, Looney tuvo que enfrentarse por un lado a las presiones de los inversores que querían que se centrase en el petróleo y el gas, y por otro afrontó las de grupos ecologistas que le pedían que se alejase de los fósiles.

Sin embargo, al anunciar un crecimiento de las ganancias anuales de la compañía a principios de 2023, Looney fue criticado por grupos ecologistas, ya que ese aumento se debió a la subida del precio del gas por la guerra de Ucrania.

Adicto al fitness y siempre bronceado, según los medios británicos, Looney vive en una casa lujosa en el centro de Londres. El exconsejero delegado de BP es un usuario habitual de las redes sociales. En su perfil de Instagram se define como «campeón en diversidad» –por la práctica de políticas inclusivas– y en »salud mental». En esa cuenta publica de manera habitual fotografías de eventos de la empresa o incluso comparte vídeos de sí mismo comentando los resultados de la compañía.

Divorciado y sin hijos, Bernard Looney ha estado casado con la coach y columnista Jacqueline Hurst. Después de dos años casados, el empresario decidió dejarla por WhatsApp, informa The Daily Mail. Tras eso, ella afirmó estar «devastada».